Lopy toca las narices y el Almería toca el cielo
Su feo gesto no empaña una victoria: todo se arregla con una comida, una charla y el fútbol como pegamento
El jugador iba caliente camino del banquillo y no entendía el cambio.
LA OPINIÓN DEL PARTIDO: El Almería duerme como equipo de Primera División y todo lo demás tiene arreglo, porque lo de las tarjetas amarillas de Lopy va en su ADN y el feo gesto con el entrenador se arregla tomando un café o invitando a comer a toda la plantilla. Nada puede empañar la grandeza de una victoria que pone al equipo en ascenso directo ante uno de los huesos de la categoría que siempre se le ha dado mal. El partido del Castellón era el del Eibar y viceversa, y se ha ganado con autoridad encajando un gol de pizarra y fallando un gol el equipo Armero y poco más. No le generan ocasiones a los rojiblanco que matan cuando llegan al área rival.
Se hablará mucho esta semana del feo gesto de Lopy con sus compañeros en el cambio y con el entrenador. Carne de televisión y objeto de mil comentarios cuando todo tiene solución. Es como una pelea entre amigos o hermanos. Dura justo hasta la reconciliación y el Almería y su entrenador necesitan a Lopy, luego; tema solucionado. Si hay que llamar a Aleix Vidal para que monte una comida y que pague Lopy que se haga antes de viajar a Ceuta. Es un tema de fácil arreglo porque el Almería lo necesita y el jugador quiere al club y a sus compañeros: solo se le cruzaron los cables.
El decálogo rojiblanco
2. Rubi actuó con mesura y justicia
3. Aleix debe montar la comida y que pague Lopy
4. El centrocampista no tiene recambio
5. Las amarillas siguen en su ADN
6. El vestuario sabrá abrazarlo
7. El Eibar, un hueso vencido con autoridad
8. El gol encajado fue de pizarra
9. Todo se arregla con fútbol, café y unión
Rubi debe trabajar la mente de Lopy
El entrenador del Almería lo dejaba claro en la sala de prensa en el sentido de aplicar el régimen interno y que pague la multa el jugador invitando a una buena comida para celebrar que están en ascenso directo. Lo de Lopy no es un problema en el Almería porque se viene trabajando para que baje el número de amarillas y al final lo va a conseguir. El cambio era necesario pero el jugador otras veces ha estado más al límite y no lo cambiaron. El entrenador hizo lo que debía y Lopy se ha equivocado. Con la misma mesura de Xabi Alonso a Vinicius hay que actuar.
El problema tiene fácil arreglo con el Almería en ascenso directo a Primera.
No tiene recambio y es la base del ascenso
No es nuevo en estas lides el entrenador catalán y sabrá echar un buen café con el futbolista y ese vestuario de los jugadores que dice Rubi, se abrazará a Lopy porque es la piedra angular del ascenso a Primera. Dice Dios y se refleja en el Evangelio que todo reino dividido va a la ruina y la unión debe imperar porque todo pasa a un segundo lugar viendo competir al Almería. Bendito problema el que tiene que solucionar el entrenador porque los primeros que van a ayudar son sus futbolistas. No tiene ni que entrar en el vestuario: tema zanjado.