La Copa de las oportunidades... aprovechadas. El Almería manejó el partido frente a un Lorca voluntarioso pero que no logró hacer daño a Fernando salvo en el tramo final con disparos lejanos que se iban por encima del larguero. Porque este torneo te puede quitar mucho si la mentalidad no es la correcta. Rubi sacó un once para que se lucieran los menos habituales y cumplieron. Ninguno por debajo del nivel esperado, ni tampoco brillando en exceso, porque tocaba ser prácticos y no lucirse. Pico y pala, sin sustos y adelante.

En ese mar de pruebas el único que no pudo matricularse fue Fernando, quien solo intervino para saques de puerta y poco más. La defensa ordenada con Aridane imperial e insuperable por arriba y más seguro con balón, secundado por un Pedro Fidel que cada vez crece más pese a tener un papel secundario en el equipo.

Robertone, de apartado a titular en el Almería

El Lorca, de Segunda RFEF, se puso a la altura del Almería y agobió a Gui, Selvi y la sorpresa Robertone cuando de generar fútbol se trataba. La entrada del argentino en el equipo cuando en verano quedaba apartado al no entrar en los planes del nuevo proyecto.

Ya no es capitán Robertone, pero sí una pieza más para Rubi y el entrenador le dio minutos para demostrar que se equivocaron con él, que su ciclo no ha terminado. Incluso parece que la afición se ha reconciliado con él cambiando los silbidos por aplausos en el cambio.

Un extremo prometedor llamado Perovic

El ataque, con Arnau en la derecha y Perovic por la izquierda, no fue tan vertical como de costumbre, pero el montenegrino fue la luz que más brilló en el 'Artés Carrasco'. Es el extremo diferente, al que le gusta el uno contra uno y no tiene reparos en intentarlo una y otra vez. Su mejor socio fue Thalys, que también aportó algunos movimientos de ‘9’ prometedor. De hecho, el brasileño fabricó el 0-1 dentro del área pequeña y en lugar de lanzar, levanta la cabeza y ve la entrada de Perovic para marcar gol.

En el segundo tiempo el Lorca dominó más con balón y las ocasiones fueron para el Almería. Melamed perdonó y no Embarba. El extremo se quedaba solo ante Fran Árbol y con maestría picaba la pelota para sentenciar en el minuto 90.

Todos los jugadores salen ganando con el pase

Más cosas positivas que negativas. Regularidad, oportunidades y escaso sufrimiento cerca de Fernando. Arropados por más de 1.000 rojiblancos, el Almería se tomó la Copa del Rey muy en serio y supo aceptar momentos sin pelota para ser merecedor del pase.

Los suplentes, o menos habituales en Liga, tenían la papeleta de utilizar la Copa para crecer o quedar marcados por una eliminación sonrojante. Ocurrió lo primero. Este equipo tiene hambre y sed de victorias. A por el Eibar el sábado en la Liga y otra eliminatoria más en la Copa del Rey.