Ya lo quisieran en muchos campos de Primera División el ambiente que se vive en la Nueva Condomina en los partidos del Real Murcia que milita en la 1ª RFEF y apunta al ascenso a LaLiga. En el banquillo del equipo gran se sienta un almeriense llamado Fran Fernández que aceptaba el reto de dirigir a un coloso de cara al ascenso. Con toda la presión mediática de un club que tiene infraestructuras de Primera División y una afición detrás que empuja mucho, el almeriense lleva al equipo con paso firme por los lugares altos de la clasificación habiendo sido líder en muchas jornadas de la temporada. No es fácil vivir con la presión que genera un Real Murcia muy lejos de donde le corresponde por historia.

La mínima victoria ante el Hércules (que desplazó a 3.000 seguidores) ha sido muy celebrada en lo deportivo y en el apartado económico ya que las arcas del club no paran de recibir ingresos y el campo se está convirtiendo en uno de los más concurridos de España muy por encima de la Segunda División y de la máxima división. El ambiente en Murcia viene condicionado por las ganas de volver a la élite y se ha apostado fuerte por un entrenador que conoce el camino.

Historia

No es de extrañar lo que se vive en Murcia con el paso de las jornadas viendo al equipo instalado en la zona alta de la clasificación. El club grana ha estado muchas temporadas a caballo entre la Primera y Segunda y no es su lugar la 1ª RFEF. Han apostado por un entrenador que sabe manejar la euforia y conoce el oficio. Hizo grande al Almería y ascendía con el Alcorcón. No le viene grande una entidad donde la historia pesa mucho y obliga siempre a los mejores resultados. Con Fran en el banquillo todo está bajo control y sabe que lo bueno está por llegar ya que lo tiene todo a su favor pese a lo que implica dirigir a un coloso como el Real Murcia.

Ambiente

Cada partido en casa genera una enorme presión a los futbolistas que ven las gradas cubiertas y les exigen el máximo. No es fácil vivir con la obligación de ganar primero y jugar bien después pero del manejo de esta situación se encarga el entrenador. Son futbolistas con ficha de la tercera categoría nacional compitiendo al nivel de la Primera y esto genera un desgaste para los menos expertos mientras que los veteranos hacen de la grada su principal aliada. Cada partido en la Nueva Condomina exige más y la cita ante el Hércules ha elevado la cifra de aficionados pero no será el techo de la temporada porque la afición está desatada en Murcia.

Control

Al frente de todo está Fran Fernández que ha asumido el reto de ascender al Real Murcia y sabe que ser segundo no es bueno y le piden el liderato y la única plaza de ascenso directo como colofón a su gran trabajo. Todos quieren derrotar al Real Murcia que parte con el sello de favorito pero sabiendo su entrenador lo que se genera a nivel de presión por la necesidad e vencer a todos los rivales. En el triunfo y en la derrota sabe Fran Fernández mantener la calma y lanzar el mensaje justo para que nadie saque los pies del tiesto y tengan todos claro que la categoría exige y salir de la 1ª RFEF no es tarea fácil por la enorme igualdad.

Locura en Murcia por volver a LaLiga.