Si alguien pensaba que el Almería iba a levantar el pie del acelerador tras la magnífica remontada frente al Sporting, se equivocaba. Fran Fernández no quiere relajación en el vestuario y recibió a la plantilla con una exigente sesión física después del día de descanso. La victoria del pasado domingo es historia y ahora toca visitar a otro club que busca la permanencia, el Rayo Majadahonda. Lucien Owona, que arrastra molestias, pudo completar casi todo el entrenamiento, pero en el partidillo final habló con el míster, el cuerpo médico, y se marchó al vestuario para recuperar.

La gran noticia de la mañana fue Samu de los Reyes, que empieza a hacer ejercicios con el grupo tras la grave lesión de tobillo que sufrió en julio. Mientras, Gaspar Panadero ya lanza a puerta con normalidad. Después de un calentamiento suave, y trabajo de posesión de balón, Víctor Fortes, preparador físico, dividió el grupo en dos. El primero se fue con Fran Fernández a realizar trabajo táctico, y el segundo apenas tenía respiro, ya que el circuito consistía en esprintar, lanzar dos veces a puerta; primero con el pie, y luego de cabeza, además de hacer cambios de ritmo. Exigencia máxima.

El entrenador rojiblanco dialogó mucho con los futbolistas. Del filial acudieron Guille Lara, Iván Martos, Fran Callejón, Mario Abenza y Sergio Pérez. Este jueves volverán a ejercitarse en el campo Anexo, ya que el Mediterráneo se ha resembrado.