Manolo Jiménez es un entrenador curtido en mil batallas y ha aceptado el reto de llevar a Las Palmas a Primera. El club insular ha apostado por un bloque con jugadores de calidad contrastada, como Rubén Castro, Ruiz de Galarreta, Sergio Araújo y el exrojiblanco Fidel Chaves. Sin embargo, tras dos jornadas sin ganar se empieza a hablar de pequeña crisis en Gran Canaria y esta situación no le gusta al míster sevillano.

Las Palmas es tercero, a dos puntos del ascenso directo, y espera muchas dificultades en el Mediterráneo para sumar los tres puntos. Manolo Jiménez analiza al conjunto rojiblanco: “El Almería se hace fuerte en su Estadio. Aquí todos nos jugamos mucho y para nada espero facilidades por su parte. Nosotros tenemos que sumar con nuestras armas, siendo dominantes en la mayoría de los partidos”.

Obsesión

Rubén Castro es el máximo artillero amarillo, con seis dianas. Se presenta como el mayor peligro para la meta almeriense, y es que pese a encadenar dos semanas sin ver puerta, Jiménez quita hierro a la situación: “La obsesión solo es por ganar, no por marcar. Dicen que los goles son cuestión de rachas y los jugadores tienen la capacidad para materializar las oportunidades”. El técnico, que respeta la trayectoria del Almería, entiende que su plantilla ha hecho méritos suficientes como para sumar más puntos después de ocho jornadas: “Los resultados son consecuencia del fútbol. Nosotros hemos sido superiores a los rivales, pero llevamos menos puntos de los que merecemos”. Fran Fernández dejó claro que Las Palmas tiene “la plantilla más completa de Segunda”, a lo que Manolo Jiménez respondió: “Tener grandes jugadores es una solución, no un problema. Soy un entrenador moderno, porque intento no perderme ningún curso, vídeo o charla. Por eso cuento con todos para encontrar un resultado positivo”. Las Palmas tiene un objetivo claro y Manolo Jiménez pide más tranquilidad.