El entrenador del Almería tiene su librillo como todos pero la vida le ha regalado una experiencia que jamás olvidará: salvar al club de su tierra en 6 partidos de Liga. Solo ante el peligro.

El manual de Fran Fernández para triunfar en el club de sus amores pasa por acordarse cada día y cada partido de esos 6 partidos que marcaron su vida: nuestras vidas.

Cada salida del túnel de vestuarios antes de un partido que recuerde aquellos duelos a vida o muerte cuando tenía a toda una provincia pendiente de sus decisiones. No tenía margen de error y salvó la Liga Profesional.

Fran Fernández tiene la llave del éxito en la medida que haga llegar a sus jugadores todo lo que no se debe hacer en un club de Segunda División. Eso de salir al campo a verlas venir se ha terminado con Fran. Esos jugadores que se las saben todas que se vayan a otros clubes y el que se ponga la rojiblanca que sienta lo mismo que Fran Fernández.

La primera cabeza que van a cortar es la suya. Llegar a noviembre fuera del peligro le hará acabar la temporada y todo lo demás es un cuento chino. A Fran se le va a exigir más que a otro entrenador de nombre. Me quedo con el hombre.

Lo único que necesita Fran para triunfar en el Almería son futbolistas en buen estado físico y mental. Y eso a veces se logra en el mes de julio acertando con los fichajes. Un futbolista en Segunda dice que lo sabe todo. Craso error.

El entrenador del Almería no puede olvidar ni un minuto de donde venimos. La primera jornada para él debe de ser la última. Cada victoria es otra semana de trabajo y así a por la siguiente.

Los entrenadores en paro se van a acreditar desde la primera jornada en el Mediterráneo. Los llamados grajos estarán sueltos a la espera de un mal comienzo del Almería para tomar su banquillo. Saben de la fragilidad del presidente llegados los malos resulados.

Cada día de partido al salir para el banquillo que mire a donde tantas veces (seis) lo hizo la pasada Liga. Los futbolistas se olvidan de todo pero Fran debe de tener buena memoria.

Triunfará si logra corregir a tiempo.