La salud emocional infantil y adolescente se ha convertido en uno de los grandes retos de la sociedad actual. Cada vez más familias buscan orientación profesional para acompañar a sus hijos en la gestión de sus emociones, afrontar la frustración o desarrollar habilidades que favorezcan su bienestar psicológico. En ese ámbito trabaja la psicóloga María Ortiz Ruiz, especialista en infancia, adolescencia y gestión emocional, que centra su labor en el acompañamiento cercano a niños, jóvenes y padres.

En la capital almeriense, la profesional dirige su consulta ubicada en la Avenida Federico García Lorca, 43, un espacio dedicado al desarrollo emocional y personal desde una perspectiva integral. María Ortiz explica que su vocación nació del deseo de “comprender y apoyar el desarrollo integral de los niños, ayudándoles a la formación de su personalidad y a afrontar problemas como la ansiedad o la impulsividad”. A lo largo de su trayectoria, ha centrado sus esfuerzos en promover entornos familiares saludables y en adaptar su práctica a las necesidades cambiantes de la sociedad actual, apostando por un ejercicio de la psicología que une ciencia, empatía y compromiso humano.

Una terapia basada en la evidencia y la empatía

El trabajo de María Ortiz se apoya principalmente en la terapia cognitivo-conductual (TCC), combinada con la gestión emocional y la terapia de aceptación y compromiso. Esta orientación, afirma, “ha recibido mayor evidencia empírica sobre su eficacia y efectividad en una gran diversidad de problemas”, aunque defiende un modelo flexible que se adapte a cada persona. Sostiene, “Es importante en psicología ser ecléctico a la hora de los tratamientos, para poder abarcar todas las necesidades de las personas”.

Entre los casos que aborda con mayor frecuencia se encuentran los relacionados con la baja tolerancia a la frustración en niños y adolescentes, una dificultad cada vez más habitual. Considera imprescindible que los menores “se sientan escuchados y comprendidos por el psicólogo”, y que aprendan a desarrollar la paciencia, a valorar la cultura del esfuerzo y a “convertir la frustración en aprendizaje”.

El acompañamiento de las familias ocupa un lugar central en su método de trabajo, por lo que afirma que “los padres son figuras esenciales en la psicoterapia de sus hijos: actúan como informantes claves, agentes de cambio y apoyo”. Para ella, su implicación resulta fundamental en la aplicación de los aprendizajes terapéuticos en casa, pero también en la construcción de un entorno de confianza y seguridad emocional. “Los padres son el soporte fundamental para la evolución del tratamiento y el equilibrio emocional de sus hijos”.

Educación emocional y nuevos desafíos sociales

Convencida de que la salud mental debe trabajarse desde la infancia, María Ortiz considera que las escuelas “desempeñan un papel importante en el desarrollo de la inteligencia emocional, porque influye directamente en la motivación, la concentración y la convivencia dentro del aula”. Por ello, defiende la incorporación de programas curriculares que fomenten la educación emocional tanto en el alumnado como en el profesorado, de modo que los centros educativos se conviertan en entornos más empáticos y saludables.

La psicóloga almeriense también reflexiona sobre el papel que las redes sociales desempeñan en la salud mental de los jóvenes. A su juicio, su influencia es “ambivalente”, ya que “pueden aumentar la ansiedad, la depresión o la baja autoestima, pero también ofrecer apoyo emocional y facilitar información útil sobre salud mental. El impacto dependerá del uso que se haga de ellas”. En este sentido, considera esencial enseñar a los adolescentes a establecer límites de tiempo, proteger su privacidad y aprender a verificar la información y la identidad de los usuarios.

En su día a día, María Ortiz acompaña a muchas familias que necesitan orientación sobre cómo manejar las emociones de sus hijos. A ellas les recomienda “aprender estrategias para modelar comportamientos saludables, identificar y nombrar emociones, y validar todas ellas, incluso las negativas”. Para la psicóloga, la clave está en “crear un ambiente de seguridad para que los hijos puedan expresarse libremente”.

Con una trayectoria marcada por la sensibilidad, el rigor y la vocación de ayuda, María Ortiz Ruiz se ha convertido en una referencia en el ámbito de la psicología infantil y adolescente en Almería. Desde su consulta atiende de forma cercana y personalizada a niños, adolescentes y familias, acompañándolos en su desarrollo emocional y en la mejora de su bienestar psicológico.

Su compromiso, explica, pasa por “ayudar a las personas a crecer emocionalmente y a entenderse mejor a sí mismas y a los demás”, una filosofía que define la esencia de su trabajo diario y el sentido de su profesión.

Quienes deseen contactar con la profesional pueden hacerlo a través del teléfono 634 683 087, del correo psicologa.mariaortiz@gmail.com o en la web www.mariaortizruiz.es, donde se recoge en detalle su labor y las áreas en las que trabaja.