Pulpí, Mojácar y Zurgena están inmersos en la gestión del virus del Nilo en sus municipios tras detectarse el pasado viernes la presencia de mosquitos portadores del mismo en las trampas de control instaladas por la Junta. De esta forma, Zurgena se mantendrá durante otras cuatro semanas en alerta, situación a la que se suman ahora Pulpi y Mojácar, declaradas áreas en alerta desde el 8 de agosto.

Por ello, el nivel de riesgo alto se mantendrá en los muncipios, al menos, durante cuatro semanas, siempre y cuando no se declaren nuevos casos ni se detecte la circulación del virus en los mosquitos vectores de esta enfermedad, aves o équidos. Es el caso de Zurgena, que lleva en alerta desde el pasado 16 de julio.

Manos a la obra

Según ha podido saber este medio, en la mañana de este lunes, el delegado de Salud, Juan de la Cruz Belmonte, junto con los técnicos inspectores de salud pública del distrito, se ha reunido con los ayuntamientos y las empresas encargadas de la desinsectación de las nuevas zonas afectadas para transmitirles los pasos a seguir. 

Dos municipios que "ya se encontraban en un nivel medio de riesgo y estaban realizando su Plan Municipal de Vigilancia y Control Vectorial". "Al encontrar en trampas situadas en el municipio mosquitos potencialmente transmisores del virus del Nilo Occidental, lo que hacemos es reforzar los tratamientos de desinsectación y, sobre todo, ponernos a disposición de estos dos ayuntamientos con las empresas encargadas para la coordinación y la ayuda en cualquier tipo de consulta a nivel de salud pública", ha transmitido el delegado.

Desde que se detectara la presencia del virus del Nilo en los municipios —primero Zurgena y ahora Pulpí y Mojácar—, los ayuntamientos se han puesto manos a la obra para prevenir la propagación del agente infeccioso. El mismo viernes, todos emitieron un comunicado para informar a la población a través de redes sociales, en el que quisieron trasladar un "mensaje de tranquilidad", pues no se había "registrado ningún caso en personas y la situación estaba completamente controlada".

Así, las administraciones están realizando fumigaciones intensivas y periódicas con larvicidas en zonas de riesgo, revisando puntos de cría y limpiando espacios públicos, todo en coordinación con las autoridades sanitarias. También informan a los vecinos para que colaboren con medidas preventivas como eliminar agua estancada y usar repelente, con el objetivo de reducir la presencia del mosquito y proteger la salud pública.

Sin contagio en humanos

Por otro lado, tras las reuniones mantenidas, el delegado de Salud ha incidido en la importancia de detectar "la presencia de estos mosquitos antes de que se produzca la transmisión en humanos".

Es importante remarcar que en lo que va de año, aunque se han detectado varios mosquitos portadores —como el caso de El Toyo— y un equino dio positivo a mediados de julio, en la provincia de Almería aún no se ha dado ningún caso en humanos.