La llegada del aire polar a la península y más concretamente a la provincia de Almería no ha tardado en dejarse notar. Tal y como apuntaban las previsiones meteorológicas, los termómetros se han desplomado durante la madrugada del jueves al viernes y han llegado a marcar temperaturas de hasta cinco grados bajo cero en las últimas horas.

Esta situación de frío extremo se ha dado en el término municipal de Gérgal y, concretamente, en el entorno del Observatorio de Calar Alto, según recoge la red de la Asociación Meteorológica del Sureste (Ametse). Ha sido la estación que ha registrado la temperatura mínima más llamativa pero no la única que ha señalado temperaturas por debajo de los cero grados.

Esta situación se ha dado también en varias localidades sobre todo del norte de la provincia, en la comarca de Los Vélez y en parte del Valle del Almanzora. En Topares las temperaturas recogidas por Ametse señalan unas mínimas esta madrugada de -1 grado, mientras que en Serón y Alcóntar se han dado -0,8 grados; en Oria (estación de Los Álamos) se ha llegado a los -0,3 al igual que en Chirivel (estación de El Contador).

Las mínimas han caído sobremanera en general en todo el territorio almeriense, como muestran también las mínimas en otras localidades como Tahal con -0,2 grados o Laujar de Andarax (0,1 grados) o Bacares (0,4 grados).

La nueva situación con la entrada del aire polar a la provincia no sólo afectará a las temperaturas mínimas. Las máximas también han descendido considerablemente por lo que la temperatura media será este viernes muy inferior a la de días pasados. En el caso de la capital almeriense, por ejemplo, se espera que las máximas no superen los 18 grados en los próximos días.

De hecho, en torno a las diez de la mañana de este viernes los termómetros aún marcaban cifras muy por debajo a las que hasta ahora eran habituales como los -4 grados en Calar Alto; los 2,9 de Abrucena; los 2,1 en Bacares o los 0,9 en El Contador (Chirivel) o los 1,8 en Laujar de Andarax o María.