‘Black Mirror’ y su rodaje en Almería: así fue

Netflix ha producido algunas de las series más exitosas y aclamadas de los últimos tiempos, y una de ellas es "Black Mirror" (2011). Esta serie de ciencia ficción ha conquistado a la audiencia con su mirada crítica sobre la tecnología y su impacto en la sociedad. Con seis temporadas llenas de episodios independientes, "Black Mirror" explora futuros posibles y realidades alternas que a menudo resultan inquietantes y perturbadoras. Lo que pocos saben es que una de sus temporadas se rodó en España, concretamente en Almería.

En la cuarta temporada de la serie, más precisamente en el episodio seis titulado "Black Museum", parte del rodaje tuvo lugar en el desierto de Tabernas, una de las localizaciones más icónicas de la provincia de Almería. Esta zona es famosa por haber servido de escenario a múltiples producciones cinematográficas, en su mayoría del género western. Su paisaje árido y cinematográfico ha sido elegido por directores de renombre para recrear atmósferas únicas.

Dentro de este episodio de "Black Mirror", los espectadores pueden reconocer algunas localizaciones almerienses, entre ellas el desaparecido Restaurante Alfaro y una gasolinera del municipio. Estas locaciones contribuyeron a crear el ambiente desolado y misterioso que caracteriza la historia de "Black Museum". En el episodio, un viajero se detiene en una remota estación de servicio antes de visitar un museo que alberga objetos de experimentos tecnológicos con consecuencias aterradoras.

Tabernas, un escenario de ficción en Almería para 'Black Mirror'

La elección de Tabernas no fue casualidad. Su paisaje desértico y su historia cinematográfica brindaron el escenario perfecto para transmitir la sensación de aislamiento y tensión que requiere la trama del episodio. Además, la versatilidad de Almería como localización ha sido aprovechada por muchas producciones internacionales, consolidando su prestigio en la industria audiovisual.

"Black Mirror" sigue siendo una de las series más impactantes y visionarias de Netflix, y el hecho de que parte de su rodaje haya tenido lugar en España es un motivo de orgullo para los amantes del cine y las series. Almería, con su inconfundible paisaje, sigue demostrando que es un lugar ideal para contar historias inolvidables.