¿Qué va a pasar?

• Simone y Rui tienen un nuevo plan para asesinar a Justino.

• Tiago quiere recuperar a Cacao, pero Anita no le deja solo ni un segundo.

¿Qué ha pasado?

• Cacao rompe con Tiago y le acusa de aprovecharse de ella.

• Marco deja que Cacao se quede en su casa.

¿Qué está pasando?

Tiago está desesperado desde que Cacao se marchó de su casa. El chico cree que no debió acostarse con ella en su momento más vulnerable, pero Pipa le anima: "Cacao no tiene diez años, sabía perfectamente lo que hacía. Es mejor que dejes de pensaren ella". Tiago agradece su apoyo, pero confi esa que es incapaz de pasar página: "Necesito saber dónde está, no pienso dejar que esto lo arruine todo".

Salomao rompe el trato

Simone acude al despacho de Salomao para volver a acostarse con él. Su sueño se desvanece cuando el abogado le dice que ya sabe quién es Cacao y que ha comenzado el proceso legal para reconocerla como heredera de la fortuna de Justino. Simone monta en cólera, recordando el trato que tenían, pero Salomao afi rma que nunca se comprometió a darle información sobre la bastarda.

La mujer finge desmayarse y, cuando todos salen de la oficina en busca de ayuda, aprovecha para revisar entre las cosas de Salomao.

Lalá la pilla in fraganti y la echa inmediatamente, asegurando que la amistad tiene un límite. "No pienso dejar que me arruine la vida, si fueses mi amiga estarías a mi lado. Ya veo que no... así que, olvídate de mí", dice Simone antes de marcharse.

Otra prueba de ADN

Cacao quiere repetir las pruebas de ADN, pues no se fía del test realizado por Quim. Salomao intenta hacerle cambiar de opinión confesando que le recuerda mucho a Justino: "Tus gestos, tu forma de hablar, la genética es increíble". Aun así, la joven insiste, pues en el fondo de su corazón, desea seguir siendo solo la hija de los humildes guardas de la plantación: "No acepto que mi padre no sea quien siempre creí que era".

Marco se ofrece a acompañarla y, aunque Salomao no confía en él, acaba aceptando, pues Cacao dice que sin él no irá a ninguna parte.

Mientras tanto, en la otra punta de la ciudad, Júlia pide a Anita que se olvide de su hijo: "Tiago ha roto muchos corazones y no te ha prometido nada. No quiero que sufras".

La semana pasada, una media de 190.000 espectadores (1,8 % de share) siguieron esta telenovela.

DIVINITY • 20:55 h • Del lunes 9 al viernes 13