La historia de El Walili de 2023 se repite, también en Níjar y también en un asentamiento chabolista: el Juzgado de Primera Instancia número 1 de Almería ha ordenado el desalojo de más de medio centenar de personas que viven a día de hoy en el poblado chabolista del Cortijo El Uno, situado en San Isidro, Níjar. Y todo, sin una alternativa habitacional para los residentes de este lugar, entre los que habría nueve menores de edad.

El desalojo está planificado para este martes, 25 de febrero, y la orden judicial poco tiene que ver con las administraciones públicas implicadas. No en vano, la medida se ha tomado a raíz de una demanda presentada por el propietario de los terrenos ocupados por este asentamiento chabolista. El desalojo, si bien se notificó en verano, será ejecutado este martes como última opción, en caso de que los más de 50 migrantes que residen en él no abandonen el lugar de forma voluntaria.

Y si bien el Ayuntamiento de Níjar ha aclarado que la situación no tiene nada que ver con la gestión municipal, ya que se trata de una orden judicial referente a un suelo privada derivada de una demanda del propietario, lo cierto es que las entidades que trabajan a pie de campo en el difícil mundo de las infraviviendas han denunciado que el desalojo del asentamiento se lleve a cabo sin una alternativa habitacional para sus residentes, dejándolos literalmente en la calle.

No en vano, sería el Ayuntamiento de Níjar en primera instancia quien debería atajar la situación a través de sus Servicios Sociales y, en segundo lugar, la Junta de Andalucía. Ninguna de las dos administraciones habrían actuado en este caso en el que más de medio centenar de personas se quedarán en la calle. Mientras tanto, los alojamientos transitorios de Los Grillos continúan cerrados a cal y canto y sin entidad que los gestione. 

Por ahora, Almería Acoge ha solucionado la situación de algunos de los habitantes del asentamiento, algunos varones que podrán ser realojados gracias a la disponibilidad de unas pocas plazas de la entidad. Mientras, los demás no tienen una solución.

Condena de varias entidades

En concreto, el Secretariado diocesano para las Migraciones de Almería y cinco entidades de Iglesia que trabajan en Níjar (Cáritas, Hermanas Mercedarias de la Caridad, Servicio Jesuita a Migrantes, Confer de Almería y Hermandad Obrera de Acción Católica -Almería) han hecho público un comunicado en el que denuncian que esta medida "pisotea la dignidad y vulnera los derechos" de las personas residentes en El Uno.

"Manifestamos nuestra repulsa ante el atropello de derechos que supone esta actuación, nuestra sorpresa ante la falta de sensibilidad y nuestra indignación ante la ausencia de respuesta mostrada por las Administraciones Públicas", denuncia el escrito publicado este domingo.

Al mismo tiempo, el comunicado muestra el reconocimiento de estas entidades al papel del Defensor del Pueblo Andaluz, con el que se reunieron la pasada semana precisamente. Destacan de esta figura su defensa de los derechos humanos, la fiscalización de la labor de las Administraciones y su invitación a "no aceptar como normal lo inaceptable". 

No más desalojos sin realojos

En el mismo comunicado se recuerda que "todos los ciudadanos tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada", y además exigen "que no haya más desalojos sin realojo; sólo se puede pretender la erradicación del chabolismo si se facilita el acceso real a una vivienda digna y adecuada".

En este sentido cabe recordar que precisamente el SJM gestionó el fin del asentamiento de Cañaveral dándole una solución a sus habitantes en casas de San Isidro. 

"Nuestro compromiso es acompañar, servir y defender a las personas vulneradas en sus derechos", recuerdan en el comunicado. 

Como entidades de Iglesia, recuerdan su deseo "de ser una Iglesia cercana y samaritana; pobre con los pobres y para los pobres".