La llegada de la temporada turística vuelca a las distintas áreas municipales en el repaso de farolas, papeleras y señales; este año con una novedad: los pasos de peatones están siendo repintados sólo en sus extremos y convertidos en lo que se conoce pasos ‘punteados’, que comienzan a ser usuales en distintas ciudades y están presentes en numerosos países de Europa.

Su uso responde al objetivo de mejorar la accesibilidad de los peatones y la seguridad de los vehículos, principalmente para motocicletas y bicicletas. Fueron los motoristas los que alertaron del peligro que supone la pintura de los pasos de peatones comunes. En días de lluvia o humedad, aquellos que no cuentan con un material antideslizante específico, provocan caídas de las motocicletas. Un peligro que también se presenta para los propios peatones “con resbalones producidos por la suciedad y los restos de combustible y aceite de vehículos”, según los expertos.

La movilización llegó al Congreso y el PP llegó a presentar en 2012 una Proposición No de Ley para que se dejara sin pintar una de las franjas de los pasos peatonales.

Sin normativa Finalmente parece que se generaliza la opción de señalar sólo los extremos. Una medida que, sin embargo, no se encuentra amparada por ninguna ley. Ni el Reglamento General de Circulación ni el catálogo oficial de señales de tráfico mencionan los pasos punteados. Sí aparecen en el documento que desarrolla la Orden ministerial  de “Condiciones básicas de accesibilidad y no discriminación para el acceso y utilización de los espacios públicos”, pero tan sólo se pueden encontrar en los dibujos que explican los tipos de pavimento táctil indicador en itinerarios peatonales accesibles, no en el interior del texto. Es por ello que el uso de estos pasos, que tradicionalmente se utilizaban para las vías ciclistas, generan ciertas dudas entre los expertos.

Fuentes del Ayuntamiento roquetero explican que en el caso del municipio, se solicitó el permiso pertinente a Tráfico para la conversión de los pasos, y que se continuarán transformando conforme precisen un repintado.

Ahorro Los Ayuntamientos que han aplicado estos nuevos pasos resaltan el ahorro que supone respecto a los repintados completos, que puede estar en un 20%.

Mucho más si se toma como referencia el costo que supondía usar pintura antideslizante. Ahorro y seguridad están tras los nuevos pasos.