En menos de dos años, un pueblo del interior de Almería le ha dado la vuelta a su urbanismo como si se tratase de un calcetín. Calles mucho más amables para el peatón, mejores espacios públicos como parques o plazas, y aparcamientos disuasorios, entre otros trabajos como la construcción de un nuevo ascensor, pueden resumir lo que supone el proyecto denominado como 'Corredor Peatonal' en el que ha sido posible una inversión aproximada de 2,5 millones de euros.

Así ha cambiado el núcleo urbano de Cantoria gracias a la iniciativa mencionada anteriormente impulsada por el Ayuntamiento mediante fondos europeos. En total se ha actuado en una docena de calles y avenidas, eliminando de las mismas todo tipo de obstáculos y adoquinándolas, lo que permite un tránsito de los vecinos y peatones mucho más seguro pero sin impedir el acceso en vehículo aunque restringido a actividades como la de carga y descarga.  "Que los resientes no teman porque podrán bajar a una persona mayor en su misma puerta sin ningún problema, descargar…", explicó recientemente la alcaldesa, Puri Sánchez, durante una entrevista en la Cadena SER.

Se trata sin duda de una de las obras de mayor envergadura de las últimas décadas en Cantoria y su propósito no ha sido sólo el de embellecer sus espacios públicos y darle prioridad al peatón como mandan los tiempo. Además, según recordó la alcaldesa, con esta "que ya se culmina" se ha logrado "que haya una zona limpia de gases de efecto invernadero, provocados entre otras cosas por los vehículos y contribuir así a tener un pueblo más sostenible, que es el principal objetivo de esta subvención", especificó Sánchez.

Las actuaciones van mucho más allá de esos arreglos de las calles, ya que el proyecto ha incluido "la remodelación total de dos de nuestras plazas" como son la plaza del parque infantil Alfonso Lozano y la plaza del mirador del alcalde Juan Cerrillo Rodríguez, junto al consultorio médico, donde hemos puesto bancos, sombras, mesas…", enumera la regidora.

Aparcamientos disuasorios con aparcamiento incluido

No se queda ahí el proyecto. La imposibilidad de aparcar en ciertas calles del centro cantoriano se ha solventado con la creación de aparcamientos disuasorios, tan presentes en otros pueblos de España turísticos o amables con el peatón y que ahora son una realidad en Cantoria. "Este proyecto lleva dos parkings disuasorios: uno situado junto al Teatro Saavedra y luego tenemos otro gran aparcamiento debajo del Parque Alfonso Lozano".

Esto, a su vez, ha motivado la creación de un ascensor en este último parking disuasorio para que,  una vez que se deje el coche los vecinos y visitantes puedan acceder al centro del pueblo por este medio si así lo prefieren. Además, se ha añadido otra zona de aparcamiento para tener aún más capacidad con unos 1.800 metros cuadrados en el Paseo de López Cuesta.

Como toda obra de relevancia, los trabajos y las limitaciones al tráfico suelen ir de la mano de quejas de algunos vecinos aunque, como suele ser común en todas estas iniciativas, el pueblo termina abrazando de buen grado el resultado final. Algo que, según la alcaldesa, también ha sucedido en la localidad cantoriana. "Todo el pueblo está muy contento", subrayó antes reconocer las molestias que han sufrido especialmente "los vecinos de esas calles que han estado levantadas y con obras".

Eso sí, ahora todos, esos vecinos y los demás, se van "a ver beneficiados porque van a poder entrar y salir de sus casas sin muchas molestias y sin tener que mirar veinte veces a un lado y a otro, por ejemplo ante coches circulando por sus puertas buscando un sitio donde aparcar". Del mismo modo, las reformadas y céntricas calles permiten "que paseen carritos o personas mayores sin obstáculos de ninguna clase" por lo que está todo el mundo muy contento", resume Puri Sánchez.

Una forma de visibilizar una de las ventajas, entre otras muchas, que supone para los vecinos este Corredor Peatonal que ha llevado directamente al pueblo de Cantoria a ser un municipio de los que demanda este siglo XXI en lo que al urbanismo se refiere.