“No me temblará la mano”
“No me temblará la mano”
A Mariano Rajoy no le gustan los comportamientos “irregulares” o “impropios”. El presidente del Gobierno y del Partido Popular lanzó ayer desde Almería, desde el Palacio de Congresos de El Toyo, un aviso a navegantes dirigido a la militancia. “No me temblará la mano si alguna vez tengo conocimiento de irregularidades o de conductas impropias que afecten a militantes de nuestro partido”, fue la sentencia que dictó ante un auditorio a rebosar - más de 500 personas -, reunido para clausurar la Intermunicipal.
El tercer día del ‘culebrón Bárcenas’, que incluye acusaciones de sobresueldos a dirigentes nacionales del PP, volvió a tener como foco de atención la cumbre de Almería y como protagonista al líder nacional del Partido Popular. Se esperaba de él una reflexión tras el supuesto escándalo. Y la reflexión llegó. “Hay personas - dijo Rajoy Brey leyendo su discurso - que estaban asumiendo unas responsabilidades en el partido y ahora ya no están. El partido actuó y se adoptaron las responsabilidades políticas. (...) Ahora están actuando los tribunales y eso tiene que ser un motivo de tranquilidad para todos”.
Secretarios generales “honrados”
Fue un mensaje similar al defendido el día anterior por la número dos, Dolores de Cospedal, si bien el presidente se escudó en la “honradez” de ésta y sus predecesores, Javier Arenas y Ángel Acebes, para certificar que “no se ha producido irregularidad alguna”.
Mariano Rajoy no despejó la incógnita de una investigación interna sobre los supuestos sobres con ‘dinero negro’, aunque sí trazó una especie de hoja de ruta para evitar que las sospechas de corrupción no regresen al Partido Popular. “Debemos ser honrados, trabajar y hacer un esfuerzo para ser ejemplares. (...) La gente así nos lo exige”.
“Que no se generalice”
En su discurso, de media hora de duración y sin apenas interrupciones, el presidente del Gobierno insistió en su rechazo de la corrupción. Pidió que no se “generalice” y consideró “inaceptable” que se diga que en política “todo es sucio”. Eso “no es ni cierto ni justo”.
La defensa del ejercicio noble de la política quiso personificarla Rajoy en las decenas de alcaldes y concejales que se encontraban allí reunidos en El Toyo. De ellos destacó “el empeño diario en cumplir con su noble cometido con honradez y ejemplaridad”. Incluso puso en valor que haya ediles que trabajan “con intensidad” sin recibir renumeración alguna.
La reforma local
Pero aunque el ‘caso Bárcenas’ - es el apellido del extesorero en la calle Génova - se haya ‘colado’ en el Palacio de El Toyo, el objeto de la visita del presidente del Gobierno fue concretar algunas de las posiciones del PP sobre la inmediata reforma de las administraciones públicas.
Tampoco es que avanzara muchas de las medidas que aprobará el viernes el Consejo de Ministros, pero sí contó que el Gobierno quiere una administración “moderna, ágil y operativa y que mejore la capacidad de respuesta a los ciudadanos”.
Por último, antes de cerrar su segunda visita a Almería en menos de un año, Mariano Rajoy dedicó un párrafo de su discurso al PSOE. “No sé porqué no quieren apoyar la ley que ha sido objeto de estas jornadas. No hay ninguna razón. Creo que es una equivocación”.