Las inesperadas lluvias torrenciales del pasado viernes sorprendieron por su virulencia en el Levante almeriense y en concreto en el municipio de Garrucha. Los vídeos de los torrentes de agua atravesando las calles de esta localidad corrieron como la pólvora. Lo que pocos han visto fuera de Garrucha han sido los desperfectos y los daños que el agua dejó a su paso.

Una semana después, el Ayuntamiento garruchero ha evaluado las consecuencias de las fuertes lluvias y ha calculado que, en el caso de los espacios públicos, estas costarán al municipio alrededor de 20.000 euros. 

Examen “exhaustivo”

Así lo ha expresado la alcaldesa, María López, en declaraciones a la Cadena SER Levante en el día de ayer, quien sin embargo advirtió que aún “estamos terminando de hacer una exhaustiva valoración de los daños”. A pesar de todo la regidora anunció que, según los cálculos del Consistorio, lograr “que el pueblo vuelva a la total normalidad” costará a las arcas públicas “alrededor de 20.000 euros”, entre los que figuran el coste de las horas de maquinaria “para retirar el barrio y piedras que dejó la lluvia, el arreglo del patio del colegio Ex Mari Orta y lo que más dañado se ha visto que han sido las playas, que en estos momentos ya están casi normalizadas” a falta de  “hacer algunos trabajos de arreglo de las instalaciones de abastecimiento de agua que hay en las playas”.

Sobre la petición de ayuda a administraciones supramunicipales, María López ha adelantado que “vamos a solicitar” tanto a la Junta de Andalucía como al Gobierno de España que “nos echen una mano en esta tarea”, a la que se le añade la circunstancia de que “la playa de Garrucha ya necesita una aportación de arena extra porque se ha quedado un poco escasa”, por lo que también solicitará una intervención en este sentido.

Más actuaciones

Para que lo ocurrido el pasado viernes no vuelva a suceder, López ha recordado que “hicimos una red de pluviales nueva en la parte alta de Garrucha que desvía y se nota el alivio que le hace a esa calle” y que por parte de la Junta se hizo “una actuación en la parte alta de la carretera canalizando una zona de recogida de aguas”.

Actuaciones que no han sido suficiente, por lo que asevera que “veremos con los técnicos si es posible hacer otra actuación en la parte alta que termine de desviar un poco más la gran avenida de agua en esta parte de Garrucha para que no vuelva a ocurrir lo que ocurrió la última vez.