Durante los meses de verano son muchos los vecinos y turistas que caminan por el paseo marítimo de Balerma. Van, vienen, se sientan en su muro, disfrutan del ambiente nocturno de su conocida jaima o simplemente, pasean con sus familias o amigos disfrutando de las inigualables vistas que siempre ofrece la playa de este núcleo de El Ejido. Pero la cosa cambia el resto del año. Y es que la imagen que presenta este paseo durante el invierno es bien distinta. O al menos, así lo han manifestado a LA VOZ varios vecinos de Balerma que han preferido permanecer en el anonimato, pero que sí que han aclarado que “el estado en el que se encuentra el paseo es desastroso. Hay farolas rotas, oxidadas, falta iluminación e incluso los matorrales han invadido el muro”.

No obstante, la preocupación vecinal también radica en los problemas de regeneración de arena que sufre tanto esta playa como la de Guardias Viejas, aunque según ha podido saber este periódico el Ayuntamiento de El Ejido tiene previsto un nuevo encuentro con la dirección general de Costas este mismo mes en Madrid. Pese a todo, las críticas que ha venido recibiendo el equipo de Gobierno respecto al estado que presenta en la actualidad el paseo marítimo de Balerma también han llegado desde la oposición. En concreto, los concejales del Partido de Almería han preguntado por esta cuestión en varias ocasiones en el Pleno, logrando el compromiso del alcalde, Francisco Góngora, en lo que concierne a un mantenimiento más exhaustivo de esta zona, así como un mayor control en la iluminación de las farolas que se distribuyen a lo largo del paseo.

Sin embargo, desde la junta local de Balerma, su presidente, Antonio Gómez, ha querido dejar claro que “el Ayuntamiento ya tiene previsto adecentar la playa, los módulos y regenerar parte de la costa de cara al verano”, a través de una partida presupuestaria de la que desconoce por el momento su cuantía. De otro lado, Gómez ha anunciado además que desde el Consistorio se están endureciendo las sanciones a aquellos propietarios de mascotas que no recogen los excrementos de sus animales, ya que éste es precisamente otro de los problemas expresados por los vecinos de Balerma, sobre todo a causa de la desmejorada imagen que provoca este tipo de comportamientos en el paseo.

Y es que en lo que sí coinciden vecinos y junta local es que lo más importante es que Balerma esté bonita durante todo el año.