La Navidad trae consigo tradiciones que se repiten año tras año, pero de vez en cuando aparece una idea capaz de sorprender incluso a quienes creen haberlo visto todo. 

Esta vez, la sorpresa llega en forma de pequeños gnomos que están convirtiendo las compras navideñas en una auténtica aventura. Un álbum de cromos diseñado para despertar ilusión entre niños y mayores y fomentar al mismo tiempo el comercio local, a la vez que lleva a competir a sus vecinos por hacerse con todos.

La mecánica es tan sencilla como adictiva: por cada compra igual o superior a 10 euros en los establecimientos adheridos, los clientes reciben un cromo. Hay 8 tipos de gnomos diferentes: presumido, comilón, pets, goloso, artesano, manitas, sabiondo o sano, cada uno de ellos en establecimientos vinculados a cada tipo, como peluquerías, tiendas de alimentación, establecimientos para mascotas, comercios artesanales, papelerías, bazares o centros de bienestar.  

Completa la colección un último gnomo que luce el escudo del Ayuntamiento, una pieza simbólica que solo se entrega cuando el álbum está completo con el resto de gnomos. Este último gnomo es, además, la llave que permite entrar en el gran sorteo final. Cuando los participantes lo recogen, sus datos se introducen en la urna que servirá para realizar el sorteo del 5 de enero, a las 12:00 horas, en el Salón de Plenos. Una fecha elegida a propósito, justo en la antesala del día más mágico del año: la noche de Reyes. La fecha límite para hacerse con todos los gnomos es el 2 de enero.

Esa mezcla de juego y apoyo al comercio ha encontrado su escenario en Benahadux, que este año ha querido apostar por una campaña cercana, participativa y llena de chispa navideña. En los primeros días desde su puesta en marcha, destaca el aumento de visitas a los comercios por parte de los vecinos de la localidad, que descubren comercio tras comercio mientras van sumando gnomos a su colección.