Expectación, sorpresa, bochorno y reacción. Estas cuatro palabras  identificaron las fases de la acción que La Fura planteó a un restringido público en la Sala B del Auditorio de El Ejido bajo el título ‘Res’.

Expectación ante la pieza de una de las más conocidas compañías españolas, que promete,  como siempre, una experiencia desafiante, avisando de la ausencia de texto, acción e interpretación.

Sorpresa, ante el panorana al entrar: una gran  pantalla proyectaba la imagen en directo de las butacas ; una voz que incita a dejar encendidos los móviles y un hombre de traje negro con un pasamontañas sobre su frente, mirando fijamente al público, impávido e inmóvil.

Bochorno ante el lento paso del tiempo, sólo la mirada penetrante del Doctor Flo.  La reacción: el público toma conciencia de su papel como motor del espectáculo y comienza a actuar entre voces de protesta, cuando no de chanza.  El clima se distendió y el público exhortó al actor a reaccionar. Sin resultado.

El Doctor continuó observando al público como el científico que estudia ratas de laboratorio. Alguien comprendió la situación y decidió tomar las riendas: cogió la chaqueta del actor, se la puso y volvió a su sitio. Rodeado por un grupo de jóvenes, el actor giró la cabeza hacia una chica, que reculó de un brinco. La cosificación del actor parecía funcionar.
 “Pero si está muerto”, “es un muerto viviente”, gritaron algunos,  lo cual pareció eliminar los escrúpulos’. Habían pasado unos cuarenta minutos cuando una chica le quitó la camisa y le bajó los pantalones, descubriendo que el actor carecía de ropa interior. Sorprendida, volvió a su asiento, dejando a la Cosa desnuda frente al público entre protestas, risas nerviosas y vítores. Al final, un espectador le devolvió su chaqueta, le subió los pantalones y lo sentó en una silla. No mucho después concluyó el espectáculo. ‘Res’ pateó la silla hacia atrás y abandonó mudo el escenario. Durante unos segundos la gente se miró entre sí, confusa, antes de aplaudir.

Parecía que todo había acabado, pero el público permaneció sentado, como esperando alguna pista.
Un hombre apareció en escena, rebuscó entre la camisa de ‘Res’ y mostró un folio de papel que rezaba “Fin”.