Tirado en la playa sobre una tumbona me sería fácil eludir la actualidad política, pero ni puedo ni quiero, sobre todo teniendo en cuenta los males de este país. Ayer, por fin, después de mucho tiempo haciéndose el remolón, acudió Rajoy al Parlamento para dar cuenta a la ciudadanía del Caso Bárcenas. El  gallego todavía se jactó de no  estar obligado  a esta presencia y dijo que acudía por petición personal pero algo ha tenido que ver la prensa extranjera, las amenazas de Rubalcaba y los escándalos del extesorero.

Tal como se esperaba, el Presidente habló de los brotes no del todo verdes de la situación económica y, ya de paso, de su relación con Bárcenas. Por primera  vez pronunciaba el nombre en público. Rearfirmó su inocencia,  y por tanto  ni va a presentar su dimisión ni tampoco convocará elecciones. Casi todos los portavoces coincidieron duramente en reprochar a Rajoy la supuesta financiación ilegal del PP durante veinte años, los millones evadidos de Bárcenas, los SMS enviados  al extesorero a muy pocos dias de  conocerse que era un delincuente. Si tuviéramos que resumirlo todo en una palabra diríamos que,. a juicio de la oposición, Rajoy mintió a la ciudadanía y que no tiene otra salida digna en este momento que presentar la dimisión.

En cambio, el Presidente, aplaudido por las bancas de su grupo,pareció sacar pecho recordando su mayoría absoluta y su honradez impecable- Oyendoselo de su propia boca daba un poco de vergüenza.

Una cosa es, como dijo Rosa Díez, la legalidad de la urnas y otra el ejercicio parlamentario donde se debe dar cuenta a la soberanía popular, En este segundo sentido, Rajoy no cumplió con su deber. No ha sido llamado por insidia marrullera de los grupos de la oposición, como dijo Alonso, sino porque así es la democracia.

Mi impresión es que esta sesión  no se olvidará fácilmente y mucho mas si con el tiempo se descubren mas cosas sobre la financiación del Partido Popular y los papeles de Bárcenas.

Como se dijo varias veces, en otros países de nuestro en torno, los presidentes del Gobierno hubieran dimitido por mucho menos.