Lo único que nos faltaba por ver en Almería es que se usaran a los ancianos de la residencia asistida en la pelea política entre la diputación y la junta. Pues lo han hecho. Estos políticos... con un par y sin vergüenza. Cincuenta ancianos almerienses están viviendo la incertidumbre emanada de unos políticos que no parece se tomen en serio la vida de estas personas, y las usan como armas arrojadizas en la pelea política con el rival. ¡Dios mío, en qué manos están nuestros ancianos, y pensar que mañana estaremos nosotros! ¿Vamos a seguir permitiendo los almerienses que se juegue de esta manera con nuestros mayores, que se les use como trincheras para las guerras de cuatro presuntos granujas políticos ante la responsabilidad de ofrecer una vida digna a personas que no se pueden defender, que no pueden darles una hostia bien dada, que es lo que se merecen? Estoy cabreao. No sé ustedes, pero que se juegue con nuestros mayores como están haciendo estos gaznápiros de pacotilla me enerva. Que la diputación y la junta se peleen y pongan a los viejos en el campo de batalla me parece el acto más abyecto que se puede cometer en política social. Pues es lo que están haciendo con los viejos asistidos los representantes de las dos instituciones, los políticos de las dos instituciones. Los impresentables de las dos instituciones.
¿Deberíamos correr a gorrazos a los políticos responsables? Deberíamos expulsarlos de la política inmediatamente, hoy mejor que mañana. Comportamientos como los que están teniendo deberían ser motivo para que no les permitiéramos estar ni un minuto más al frente de la responsabilidad de nuestros ancianos. Pero ya verán ustedes como el silencio marca el futuro trabajo de nuestra sociedad. Hay cosas ante lo que es mejor ponerse de perfil, y de perfil se mantendrá. Si la historia la hemos conocido ha sido gracias a los familiares de los residentes, a sus reuniones con algún “mameluco” y a la sensación de que se están usando a los viejos como arietes entre las dos administraciones. 
En estos días hemos visto las fotos de todos los políticos en la feria de Berlín. Felices y contentos ellos. No se les conoce preocupación por los mayores de la residencia. Las mesas nos piden que nos manifestemos por el tren, ¿nos pedirán que lo hagamos por los ancianos de la residencia?