Josefa Segura Fernández
Carta a Mama Pecha
Cristina Jiménez Quintana

Para mi Mama Pecha: Nací contigo, crecí contigo y ahora surge una separación a mis 28 años. Pero yo sé que en el camino recorrido hasta el día de hoy, he obtenido de ti todo el cariño, el amor y saber de una vida, que me has trasmitido. Ahora no estás junto a mi, pero aquellos buenos y malos momentos seguirás entre nosotras. Nuestras charlas, vacaciones, y mis pequeñas enfermedades siempre pasadas junto a ti. Cuánto deseaba tener unas pequeñas anginas para que me mimaras y me cuidaras de esa manera tan especial. Tu gran enfermedad también la hemos pasado juntas, y aunque sabíamos el final, hemos compartido lo mejor posible estos últimos momentos. Llegó el descanso Mama Pecha, y aunque no estás día tras día a mi lado, yo sé que en un lugar u otro estás con ellos, con los ángeles donde la paz y el amor llenarán tu corazón. Esa misma plenitud que tú percibas será la fuerza que sentiré para seguir adelante. Fuiste, eres y serás un orgullo para mi, y de tal modo en el transcurso de mi vida haré que tú lo estés de mi. Porque tú eres mi guía y mi luz. No te olvido: tu nieta Cristina.