Sobresaliente en matemáticas

LA OPINIÓN DEL DÍA: Los seguidores de la UD Almería no son presumidos pero a la hora de hacer cuentas pueden sacar pecho contra otras aficiones ya que llevamos toda la vida haciendo cuentas con los dedos y con la calculadora. Unas veces para ascender y otras para no bajar: de números estamos ‘sobraos’.

La famosa liga entre tres de final de temporada me la enseñó Juan Melero en los tiempos del Mármol Macael como Guillermo Blanes el cálculo aproximado en Navidad para alcanzar el objetivo de la temporada en junio.

Manolo García era más de la calculadora divina y mientras le daba a los botones de los números rogaba a la Virgen del Mar por su Almería del Alma. Ha sido una constante llegar a mayo haciendo cuentas.

Ciencias exactas

El que esté libre de pecado que tire la primera piedra. Yo no me escondo y le suelo dar al bolígrafo para ver si el Almería logra el objetivo. No soy de calculadora porque las matemáticas se me dan bien: mejor a mano.

Todos tenemos claro que el fútbol no es una ciencia exacta y puede pasar de todo en un partido pero puestos a pronosticar es mejor saber de cuentas para ver si estamos salvados o en Segunda División, que este año es lo que toca. Yo no veo al equipo tan salvado como dice la gente.

Por civil o por lo militar

En fútbol sobran tópicos y algunos nos reflejan como ese que dice ganar por lo civil o por lo militar ya que hasta la Legión llegó a desfilar por el Juan Rojas antes de un Almería- Levante que se perdió, quiero recordar.

Eso de ganar como sea y de jugarnos la vida va de boca en boca como mirar calendarios y cifras del Almería y de sus directos rivales. Nos sabemos hasta el gol average contra los rivales. Todo el día haciendo cuentas.

Ayuda divina

Las matemáticas son claras y frías pero en un deporte caliente se hacen necesarias para ir al campo más tranquilo pese a saber que la pelota muchas veces hace lo que le da la gana y no entra en la portería rival o se mete en la tuya.

En medio de tantas cifras no debemos de perder de vista esa ayuda divina a la que siempre recurrían Guillermo Blanes y Manolo García en forma de capotazos de la Patrona de Almería. La Virgen del Mar no juega pero gana partidos.

No hagan trampa con la calculadora que esta afición sabe de cuentas.