Medio millar de personas se manifiestan contra el cierre de la fábrica de Cemex

Trabajadores, políticos y vecinos se suman a la protesta contra el cierre de la planta de Gádor

Guillermo Mirón
13:18 • 27 oct. 2018

“Si esto no se arregla, guerra, guerra, guerra”, cantaban los trabajadores de la planta de Cemex en Gádor. Tienen diez días por delante para que la situación que provocaría el despido de alrededor de 300 personas en el Bajo Andarax se arregle o las protestas, como han anunciado esta mañana en la manifestación celebrada en la capital almeriense, suban de tono. Será el 7 de noviembre cuando el ERE puesto sobre la mesa por la multinacional sea prácticamente irreversible.



Los empleados de la planta y un buen número de familiares de los mismos han estado acompañados en la manifestación por cientos de almerienses de diferentes puntos de la provincia y que se han solidarizado con esta causa. Proclamas como “Cemex no se cierra” o “Gádor no se cierra”, mostrando lo que puede suponer para todo el municipio que la planta eche la persiana, se escucharon durante todo el recorrido de la manifestación a la que acudieron más de medio millar de personas y que partió este sábado a las diez de la mañana desde la Puerta de Purchena y bajó por el Paso de Almería hasta llegar a la Plaza de las Velas.






Fue allí donde los empleados miembros del Comité de Empresa y los sindicatos pidieron a la compañía que de marcha atrás o que bien busque soluciones como venderla “para que otros hagan lo que ellos no son capaces de hacer” con la fábrica. En el acto reivindicativo han estado presentes también un gran número d autoridades de todos los partidos políticos como la alcaldesa de Gádor, Lourdes Ramos; el delegado del Gobierno de la Junta en Almería, José María Martín; el alcalde de Almería, Ramón Fernández-Pacheco y el vicepresidente de la Diputación Provincial, Javier Aureliano García, entre otros.



“La fábrica de Gádor no se cierra”, exclamaba el presidente del Comité de Empresa, Antonio Orta, al término de una manifestación que tras las intervenciones de los responsables de CCOO y UGT dio paso a una última proclama con un mensaje que, si bien en este caso no cambiaría el ERE presentado, busca evitar que situaciones como la de Gádor se vuelvan a repetir. “Hay que derogar la reforma laboral”.






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