El Parque del Andarax acusa la falta de mantenimiento

El parque infantil realizado con gravilla tienen espacios prácticamente sin piedras en los que se ve la rafia

Una de las casetas para los patos y las tortugas se ha caído y todo el corcho blanco del suelo se ha deshecho en el agua.
Una de las casetas para los patos y las tortugas se ha caído y todo el corcho blanco del suelo se ha deshecho en el agua.
Lola González
21:01 • 16 oct. 2016

El Parque del Andarax estaba llamado a ser el ‘pulmón verde’ de la ciudad de Almería. Así lo vendieron tanto sus ‘creadores’ en la Junta de Andalucía como en el Ayuntamiento de la capital, si bien el pulmón no termina de respirar con la tranquilidad esperada.




Quizá sea porque apenas han pasado los meses de verano en los que la afluencia de visitantes al parque es menor, pero lo cierto es que no se encuentra en su mejor momento de mantenimiento. Nada más entrar en el recinto por su parte norte se puede encontrar una de las casetas que se habían colocado en el estanque para que los patos y las tortugas pudieran contar con zonas de sombra totalmente volcada. La parte de abajo realizada con una placa de corcho blanco para mejorar su flotabilidad no sólo se ha partido sino que se ha ido distribuyendo por el resto del agua.




Vandalismo
Los visitantes además critican la falta de limpieza de ese agua que en algunas zonas de difícil acceso cuenta con auténticos cúmulos de bolsas y restos de basura.  




El parque es también víctima de los actos vandálicos y de la falta de civismo de muchos de los que van a pasar allí el día. Así, algunas de las ventanas de los servicios se encuentran totalmente destrozadas después de recibir pedradas. El principal problema es que esos cristales siguen ahí con el riesgo de que algún menor, sin duda parte del público habitual, pueda tocar y cortarse.




Pero sin duda lo más llamativo es la situación en la que se encuentra una de las zonas infantiles. Este espacio que cuenta con suelo de gravilla con el que disfrutan la mayoría de los pequeños que acuden al parque hay zonas en las que las grandes telas de rafia que sirven de sujección de esas piedras ya están totalmente al aire.
Es cierto que los niños suelen jugar a cambiar de sitio las piedras e incluso a tirarlas pero sorprende mucho que no se haya hecho una simple redistribución de las mismas para que todo quede cubierto y no se corra el riesgo de que alguien tire de la rafia.Sin duda son problemas en el mantenimiento de un parque que no ha terminado de despegar.







Temas relacionados

para ti

en destaque