Más de sesenta terremotos en 12 horas ponen en alerta a Almería

Los primeros meses de este año están presentando una intensa actividad sísmica en la provincia de Almería. La tierra no ha dejado de sufrir sacudidas de diferente intensidad y los datos del Instituto Geográfico Nacional sitúan ya en más de 2.000 los terremotos registrados desde el  25 de enero hasta el día de ayer.

La madrugada y la mañana de ayer fue especialmente activa en materia sísmica ya que en el área de Alborán se registraron no menos de sesenta movimientos sísmicos con intensidades que oscilaron entre los 5,2 y 1,6 grados de magnitud. Si se le sumaran los que están por debajo de esos registros probablemente estaríamos hablando de entre cien y doscientos terremotos a lo largo de poco más de doce horas.

Falla de Alborán
El origen de casi la totalidad de los terremotos está en la fricción que se está produciendo entre las fallas africana y europea que, según el Instituto Geográfico Nacional, se están desplazando en paralelo estos últimos días, en la conocida como Falla de Alborán.

Sin embargo no es la única que se está mostrando activa, la Falla de Carboneras también está registrando movimientos, aunque en este caso de menos intensidad, que han generado terremotos de baja intensidad en los dos últimos días en municipios como los de Lucainena de las Torres, Viator o Taberno.

Francisco Vidal, investigador del Instituto Andaluz de Geofísica y Prevención de Desastres Sísmicos, señala que la preocupación en estos momentos se centra en el parecido de la situación actual con la existente en el mes de agosto de 1804, cuando se registró un gran terremoto en la zona del Poniente. Desde varios meses antes se habían repetido los temblores, con réplicas de diferente intensidad.

La madrugada
Desde las doce y veinte de la madrugada de ayer, y hasta las seis de la tarde, más de medio centenar de temblores se registraban en la zona sur de Alborán. El de mayor magnitud señaló 5,2 grados en la escala de Richter a las 04:40 de la madrugada, según las mediciones del Instituto Geográfico.

Posteriormente quedaron registradas numerosas réplicas de casi 4 grados, para bajar luego a entre uno y dos grados y volver a aumentar la intensidad hasta los tres grados  a partir de las tres de la tarde de ayer.

Las alertas se han activado y se trabaja en la prevención de los efectos que tendría un seismo de intensidad alta. La estimación señala la posibilidad de un terremoto de magnitud 7 o 7,5, aunque el periodo de recurrencia de este tipo de episodios es de 500 o de mil años “lo cual hace muy difícil prever que pudiera ocurrir”. Lo único que se da por cierto es que en ese larguísimo periodo de tiempo se registrará un seismo de magnitud importanta, pero pueden pasar aún cientos de años.