A las 15:00 en punto, la pasarela del P-44 Tornado descendía con precisión militar, invitando a los visitantes a cruzar su umbral y adentrarse en las entrañas de este titán del mar.

El marinero guía señala hacia los imponentes Lanzachaff SRBOC MK36: los escudos invisibles. Mientras los visitantes observan el sistema defensivo diseñado para engañar a los misiles enemigos, el marinero explica el mecanismo de este arma que crea un espejismo de bengalas y contramedidas, este ingenio es capaz de desviar amenazas aéreas y marítimas en pleno combate. Pero no solo sirve para la guerra: cuando todo falla y el silencio se apodera de las comunicaciones, estas cargas también pueden convertirse en la última llamada de auxilio desde el cielo.

Familias y parejas han conocido los entresijos de este patrullero de altura que tiene su puerto base en Las Canarias. A bordo, una tripulación de medio centenar de marinos e infantes de marina conviven, trabajan y navegan en perfecta sincronía, convirtiendo este coloso en un engranaje vivo que nunca se detiene.

El Buque de Acción Marítima Tornado (P-44) es un centinela incansable del mar, diseñado para operar en escenarios de baja intensidad donde las amenazas pueden ser tan sutiles como letales. Su misión: patrullar, vigilar y, si es necesario, actuar con precisión quirúrgica. Disuasión, prevención y respuesta. En un mundo donde la seguridad marítima nunca duerme, el Tornado surca las aguas con un objetivo claro: mantener el control y proteger cada milla de océano bajo su custodia.

El Tornado no solo domina el mar, también extiende su alcance al cielo. En su interior, un hangar espera listo para dar cobijo a un helicóptero, convirtiéndolo en una plataforma versátil capaz de ejecutar operaciones conjuntas entre el agua y el aire. Una simbiosis perfecta donde el acero y las hélices trabajan en equipo para vigilar, rescatar o actuar con precisión cuando la misión lo exige.

Para blindar sus flancos, el Tornado despliega su artillería: dos ametralladoras MK 38 MOD 2A, una a babor y otra a estribor. Vigilantes, precisas y letales si la situación lo requiere, estas piezas son los ojos y los puños del buque cuando hay que marcar territorio en el mar.

Las reflectores provee una comunicación segura durante los periodos de silencio de radio. 'Destellos Blancos'...Aterrice en este aeródromo y diríjase a la plataforma.

El 'Tornado' también habla el lenguaje del plomo y el estruendo cuando es necesario. A bordo, varias ametralladoras M2 Browning calibre 12,7 custodian la nave con su fiabilidad probada en fuego y batalla. No son armas cualquiera: estas veteranas han rugido en los campos de la Segunda Guerra Mundial, en las selvas de Vietnam, en las aguas de las Malvinas y en los desiertos de Irak y Afganistán. Hoy, siguen siendo la ametralladora pesada de referencia en la OTAN, listas para hacer su trabajo cuando la seguridad del buque está en juego.

Los visitantes pueden tomar asiento en el corazón del 'Tornado': su puente de mando. Es aquí, entre pantallas, brújulas y controles, donde los marineros trazan el rumbo y guían a este coloso de acero a través de las aguas, con la precisión y disciplina que exige la vida en el mar.

Detalle de una de las brújulas que dispone el 'Tornado' en su puesto de mando.

Los visitantes han tenido la oportunidad de descubrir los elementos que laten en el corazón del Tornado, una máquina de precisión y tecnología. Entre ellos, el sistema de navegación HC ARIES 2 para navegación y control, y el SPERRY VISION MASTER FT. También han explorado el sofisticado sistema de guerra electrónica RIGEL, el IFF CIT-25D que identifica a los aliados y el TACAN NAVIGATIONAL SET MM-6800, una herramienta vital para la navegación precisa en cualquier situación. Un conjunto de sensores que convierten al Tornado en un centinela omnipresente en el mar. A los visitantes se les ha desvelado el poder de la tecnología de combate del Tornado: el sistema de Dirección de Tiro DORNA 2, el Sistema de Combate SCOMBA que coordina la operación y los avanzados radares de última generación. Sin embargo, todo esto se ha explicado con la distancia que exige la seguridad, sin cruzar nunca el umbral de la puerta restringida a sólo personal autorizado.

El imponente cañón 76/62 OTTO-MELARA se erige como el guardián de la cubierta, listo para defender la nave con su poder destructivo. La mayoría de las preguntas de los visitantes se han centrado en este coloso de fuego, especialmente en el intrigante proceso de carga y disparo que lo convierte en un verdadero centinela del mar.

Mientras los visitantes recorren la cubierta principal, el marinero encargado de la visita les explica que el 'Tornado' está equipado con dos potentes anclas. Cuando la sala de máquinas ordena detener el funcionamiento de las hélices de paso variable y la hélice empujadora de proa. Estos dos potentes elementos son los encargados de inmovilizar la nave.

Durante su estancia en el Puerto de Almería, las principales actividades del Tornado se centran en la preparación y el adiestramiento de su dotación, así como en el mantenimiento exhaustivo de sus equipos y sistemas, garantizando que todo esté listo para zarpar en cualquier momento. Aunque su base principal se encuentra en el Arsenal Militar de Las Palmas, en las Islas Canarias, el Tornado sigue con su misión de estar siempre preparado para actuar en defensa de la seguridad marítima.
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​En la mar el buque navega cubriendo todos los puestos necesarios a tres “guardia” (turnos), que cubren las 24 horas. Las tareas y cometidos propios de la vigilancia son complementados con ejercicios de adiestramiento que garantizan la permanente disponibilidad y alistamiento operativo del buque.

Se prevé que el Tornado zarpe de Almería a finales de febrero, después de haber permanecido un mes atracado en el Puerto de Almería, cumpliendo con las tareas y preparativos necesarios para su próxima misión.

Al comenzar el recorrido por el buque, los visitantes son recibidos con un video explicativo sobre el Tornado, que les brinda una visión general de sus capacidades y misión.

Tras algunas puertas, los más curiosos pueden descubrir las dos embarcaciones RHIB Zodiac Hurricane, equipadas con motores Volvo de 260 cv, que permanecen desplegadas a bordo del buque, listas para entrar en acción cuando sea necesario.

El Tornado (P-44) es el cuarto buque de Acción Marítima (BAM) en entrar en servicio. Como sus hermanos, es una nave modular de 10 niveles, diseñada para adaptarse a distintos cometidos sobre una base común. Este patrullero de altura se une a la estirpe de los grandes de su clase: el Meteoro, buque insignia, el Rayo y el Relámpago, todos ellos símbolos de la versatilidad y poderío de la flota.