A. F. / la voz
Redacción
 
El 38,8 por ciento de los universitarios consideran que estudiar a día de hoy un curso de postgrado especializado está sólo al alcance de unos pocos y reconocen abiertamente que llegado el momento les gustaría poder cambiarse por alguno de ellos y ocupar su puesto, según las últimas conclusiones del estudio “Busco mi parecido” difundidas por la escuela ESCP Europe. El objetivo de esta acción es evidenciar las desigualdades económicas y laborales entre los jóvenes.
A pesar de estas cifras, más de la cuarta parte de los universitarios consultados (27,7%) reconoce vivir “estas limitaciones” con cierta neutralidad al entender que estudiar un máster es una opción como otra cualquiera, mientras que un 33% asegura que buena parte de los que se embarcan en estos programas formativos lo hacen más por figurar y tener un historial académico vistoso que por completar su formación.
En este sentido, uno de cada diez alumnos considera que la vida laboral no se aprende en las aulas sino cayéndose y levantándose; no opina así el 44% de los encuestados para quienes un curso de postgrado exige tal implicación, responsabilidad y constancia que lo convierte en el mejor preámbulo para lo que será la vida de empresa a la que aspiran.
En esta línea se sitúan también cuatro de cada diez universitarios para quienes la capacidad de interactuar con alumnos internacionales con una mentalidad muy distinta les hará ver el mundo y la vida de otra manera, siendo enriquecedor a todas luces en lo personal y en lo laboral.