Tengo claro que esta plantilla del Almería rompe moldes. Con ella nadie acierta y al paso que vamos en la jornada 42 dirán aquello de “hay que seguir mejorando” y la Liga se habrá terminado.

Dicen los rojiblancos de ir con “el cuchillo entre los dientes” (Dubarbier) o que “no es una final porque luego quedan más partidos”, palabra de Saveljich.

Vamos, que perder en Huesca no tendrá ninguna repercusión a nivel de vestuario pese a que un directo rival se marcharía a 5 puntos reales más el gol average, lo que implicaría para pasarles en la tabla hacer en 4 jornadas 7 puntos más que ellos.

Aquí cada uno va a su bola y me da la sensación que en Ponferrada ganamos más por los errores contrarios que por decisión propia. Creo que ese partido (único en esta Liga) respondía a parámetros del rival más que a los del Almería.

El Almería de Ponferrada ganará en Huesca de calle. Lo tengo claro. Pero todo Almería diferente al que ganó en El Toralín se quedará con un palmo de narices y sin puntos.

Esto va de alma, corazón y vida. Estamos en la recta final de la temporada y solo vale ganar. Como empecemos a verlas venir nos van a dar la del pulpo y las lamentaciones al maestro armero como decimos en Almería.

Hay que tomarse el partido como si no hubiera ninguno más. Como si el pan de los niños estuviera en el césped. Poniendo todo lo que se tenga (que no es mucho) para dejar tocado a un directo rival.

Ya no me vale ni el empate. Igual al Huesca si, cuando Albacete y Llagostera han arrancado la moto y miran la salida del pozo con moderado optimismo.

No es una final. Pero tampoco un partido más para los profesionales del Almería. Hagan cuentas y verán lo que vale una victoria y lo que te deja una derrota.

Cuando los jugadores saltan al campo se olvidan de todo. Y tras la ducha después del partido empiezan a mirar al próximo encuentro. Son los tópicos del fútbol que nos condenan.

No le llamen final como Saveljich y tampoco esperen el cuchillo de Dubarbier. Vamos a ganar y dejarnos de gaitas porque una derrota nos costará 6 puntos casi irrecuperables a estas alturas.

Una derrota mata y una victoria dejaría al equipo a 6 puntos de la salvación. Creo que llegará con los 49 puntos.

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