Con cada cambio de técnico surge el tópico. ‘Entrenador nuevo, victoria segura’, suele decirse. La máxima se cumple en casi la mitad de las ocasiones, pero no había ocurrido en la presente campaña con ninguno de los técnicos que llegaron después de Sergi hasta que ha aterrizado Gorosito. 
Con él sí se ha cumplido, pero sufriendo hasta el último minuto en el que Chumbi, completamente solo ante Julián, no ha sido capaz de superar al excelente salida del meta rojiblanco.

Equilibrio

El primer periodo estuvo equilibrado. El Almería, con las lineas adelantadas y presionando la salida del balón del rival trató de llevar la iniciativa del juego a base de sacar la pelota jugada desde atrás y  buscando la profundidad de los laterales, algo que consiguió por la banda derecha en la primera titularidad de Ximo, pero no por la izquierda.

Desde el pitido inicial al Almería se le vio reactivado y hasta liberado de ciertas tensiones que le venían condenado en sus últimas actuaciones. Se mostró firme en defensa, salvo por el costado izquierdo, sólido en el centro del campo y con Soriano e Ivan tratando de llevar la manija de juego ofensivo.

Pero este paso adelante del equipo, esta mejora general en actitud y confianza, tuvo muy poco reflejo de cara a la meta rival ya que sólo cabe contabilizar un disparo alto de Fatau dentro del área al comienzo, y al filo de la media hora dos opciones que Zongo y Quique erraron. En los últimos compases del primer periodo la Llagostera mete el miedo en el cuerpo a la grada con un disparo alto de Querol solo ante Julián y un lanzamiento de falta que salva de cabeza Soriano.

Quique abre la lata

El Almería sale atacando en tromba y no tarda en recoger el fruto de su apuesta. En el segundo minuto la defensa rechaza un lanzamiento de córner, remate Ximo desde la frontal, hay un rebote dentro del área y Quique fusila. La grada estallaba de júbilo al ver a su equipo por delante. Pero entonces aparecen los nervios, el gol saca del partido a algunos jugadores locales y la igualada no tarda en llegar, sólo 7 minutos. Julián salva un disparo de Querol y finalmente el propio Querol bate a Julian en su salida recuperando el equilibrio en el electrónico.
Se produce entonces la reacción contraria. Soriano y Lolo Reyes toman los mandos del equipo que se va arriba y no tarda, sólo 3 minutos, en volver a adelantarse en el marcador gracias a un soberbio gol de Fatau disparando raso desde la frontal.

La sentencia pudo llegar a falta de 15 minutos cuando el árbitro sacó fuera del área un derribo a Iván. En los últimos minutos los gerundenses pusieron contra las cuerdas a los locales. José Carlos mandó un balón al larguero y Julián salvó ante Chuli.