La decisión está tomada. Pero no será oficial hasta que se le comunique personalmente al afectado, que ha sido citado este lunes a las 13:00 horas en Cornellà-El Prat. Sergio González dejará de ser el entrenador del Espanyol.

Así lo ha decidido la cúpula del club, reunida a primera hora, tras la debacle de resultados, con una victoria en los ocho últimos partidos oficiales, y de sensaciones, con un equipo que cuatro meses después de iniciar la competición sigue sin encontrar un nivel aceptable de juego. Sergio, como es natural, no se sentará ya en el banquillo este martes, en la vuelta de los dieciseisavos de la Copa del Rey ante el Levante, en que el Espanyol deberá defender el 1-1 de la ida en el Ciutat de València.

Ahora es el turno de confirmar su sucesor. Y todo apunta que el mejor situado es Constantin Galca, con el que paradójicamente Sergio coincidió como jugador en el Espanyol (ambos conquistaron la Copa de 2000). Pese a su poca experiencia profesional, en una sola temporada al mando del Steaua de Bucarest, por el que firmó en junio de 2014, Galca ganó todos los títulos que estaban a su alcance: Liga, Copa de Rumanía y Copa de la Liga, por lo que lo clasificó para la Liga de Campeones antes de ser destituido por una decisión política de la directiva. Un pleno éxito en su primera aventura profesional, tras haber dirigido con anterioridad al Almería B y a la selección Sub-17 rumana.