Dilema es situación difícil o comprometida en que hay varias posibilidades de actuación y no se sabe cuál de ellas escoger porque ambas son igualmente buenas o malas. En el uso de este significado de la palabra a Carrillo se le presenta un dilema a la hora de elegir a los dos componentes de su sala de máquinas: Apostar con jugadores con músculo o hacerlo por futbolistas con talento. Hasta el momento ha habido de todo a la hora de formar el doble pivote.  
Corresponde al técnico evaluar los pros y los contras de las distintas alternativas y la disponibilidad de efectivos, a la hora de seleccionar a los futbolistas que tomen el mando del centro del campo el próximo domingo ante el Huesca.

En lo que estimo que acertó de pleno Carrillo fue en el cambio de sistema. No es fácil que los entrenadores bajen de su pedestal a la realidad de lo que dispone, por muy cruda que esta sea. A algún técnico incluso le ha costado el puesto el no acoplar el dibujo a la plantilla, prefiriendo morir antes que dar su brazo a torcer. Afortunadamente no es el caso de Joan Carrillo. Es verdad que han tenido que quemarse seis jornadas para dar paso al 4-4-2, pero afortunadamente el Almería se presentó con este esquema en Tarragona y, en mi opinión, realizó su mejor encuentro de la temporada fuera del Mediterráneo.

En un solo partido llegó a generar tantas llegadas al área contraria como en los seis anteriores, mientras que los apuros ante la meta de Julián no superaron a los de ninguno de los anteriores compromisos. Donde el técnico tienen poco o nada que hacer es la falta de eficacia de los futbolistas a la hora de dar el último pase o del gol. Me llenó de satisfacción ver la ambición del equipo y las ganas de vencer, de la que puede ser la mejor muestra el gesto de Quique luchando porque el Nástic no perdiera tiempo tras el 2-2. Es el mejor síntoma de que este equipo está vivo en la lucha por la salvación. Enero está a la vuelta de la esquina y con él la pelota estará en el tejado de los responsables del área de fichajes que tienen la obligación, sí o sí, de acertar. Considero que tienen que llegar tres o cuatro futbolistas de primer nivel para la categoría y prioritariamente un gran goleador. En las manos de los ‘fichadores’ está el futuro del club.