La ley de la botella
El entrenador del Almería nos pide ver la botella de su equipo medio llena pero...

La sombra de la botella es alargada.
Dice la ley de la botella: "el que la tire va a por ella", al menos en mis tiempos de jugador era así. Pero en el fútbol profesional parece que nadie se pone de acuerdo a la hora de mirar el contenido de la famosa botella.
Han bastado dos salidas en blanco y cuatro jornadas de Liga para que nos vayamos conociendo. El entrenador pide a la prensa que sea positiva mientras los informadores le recuerdan el potencial que tiene y los números que lleva. Normal.
Ni Sergi ni la prensa van a solucionar el tema, ya que aquí mandan los resultados y el presidente. Si el equipo no gana partidos no te salva el periodista amigo (si lo tienes), ni siquiera el presidente que te apoyó. El jefe.
La ley de la botella en el fútbol profesional obliga a ganar en cada jornada. Las exigencias del Almería son máximas y el cartel de favorito pesa lo suyo a jugadores y entrenador.
Se debe ir acostumbrando el técnico del Almería a lo que le espera si no gana al Alavés. No tiene la plantilla del Mirandés ni la del Lugo. Aquí se ha diseñado una plantilla a su imagen y semejanza y le toca responder a él. No creo que se haya gastado el presidente un millón de euros en traspasos para estar en la mitad de la tabla.
Cuando acabe el Almería-Alavés miraremos la botella que tendrá el contenido justo del resultado. Vamos a dejarnos de gaitas, que esto va de ganar y si el equipo no lo hace volveremos a lo de siempre: más presión.
Como dice la ley de la botella Sergi: "el que la tire va a por ella".