Un Almería entrenado por un defensa, Sergi, se ha convertido en una ruina a la hora de defender. Los jugadores rojiblancos han reconocido públicamente que tienen un punto negro a la hora de contener a los rivales a balón parado.

Si miramos la clasificación encontramos al Tenerife con 11 goles en contra como equipo más veces goleado seguido por un Alavés, próximo rival, que ha recibido 8 tantos en su meta. Luego aparece el equipo de Sergi.

A balón parado no han defendido bien y tanto en Zaragoza como en Lugo le remataron a gol desde el área pequeña, algo impropio de un equipo de la talla del Almería.

Entre que Casto no saca el puño y los defensores miran a su portería a la hora de defender han pasado 4 jornadas si se llevan 7 goles y mínimo dos puntos menos.

El Almería se pasa la semana viendo vídeos y diseñando jugadas pero luego el Lugo le tira tres corner y le mete un gol mientras que el Almería lanza 6 y solo remata uno al palo.

Todos lo dicen y nadie lo hace: defender bien.

Sergi ha cambiado la defensa pero se mantienen las sensaciones de peligro en cada pelota quieta.

El Almería tiene un agujero negro atrás.