La etapa de Sergi Barjuan en el Almería también pudo llegar a su punto final en la tarde de ayer. El entrenador del equipo, que llegó en la recta final para intentar arreglar lo que no pudieron Francisco ni Juan Ignacio, valoró de forma positiva la actitud del vestuario, consciente además de que son los puntos los que valen en la clasificación, y los 32 puntos no son suficientes para quedarse en Primera.

Las primeras palabras de Sergi tras la derrota más dura desde que está en los banquillos fueron: “Abatidos, derrotados, pero con la cabeza alta. El fútbol nos ha hecho daño, porque creímos en la victoria y merecimos ganar. A veces, por mucho que hagas las cosas, todo se complica”.

Descenso
No se desciende por casualidad o mala suerte. La pelota pone a cada uno en su sitio, y si Almería, Eibar y Córdoba son de Segunda, es que algo no se ha hecho bien. Desde presidente hasta el último jugador han de hacer autocrítica, porque no era una temporada en la cual las cifras de salvación eran especialmente altas: “Me siento orgulloso del equipo y de la entidad. Todo se verá diferente a partir de hoy, porque tenemos que valorar fríamente las cosas y sacar conclusiones para que no vuelva a pasar”.

Garitano cerró su etapa en el Eibar tras el descenso, y Sergi parece que hará lo mismo. Ha tenido poco margen de maniobra, pero sí oportunidades para conseguir la permanencia. Es un hombre de fútbol y sabe que sentarse en el banquillo del Almería en Segunda División es una utopía: “Acabo contrato el 30 de junio y ya veremos la situación. No quiero hablar de cosas que no tocan. Se ha intentado. Agradezco al Almería la oportunidad que me ha dado para intentar paliar la situación, y no he sido capaz de conseguir el objetivo”.

El vestuario
No se quejó de la actitud de los futbolistas en ningún momento. El toque de atención en la previa de Sevilla fue para motivar, y tampoco fue suficiente. Sin ser peores que el Valencia, el equipo ché se fue de fiesta con la Champions y los rojiblancos tristes con una derrota que les condena al pozo de Segunda: “Los jugadores han sido valientes y atrevidos, conscientes de que se jugaban mucho en cada partido. Fuimos a buscar las victorias con un margen de error mínimo”.

Equipo-afición
Ni un mal gesto, todo apoyo. La grada del Mediterráneo aceptó el descenso. Unos llorando y otros solo con la mirada perdida pensaban en lo que se había perdido a lo largo de meses y meses de lucha. “Las bajas siempre condicionan. Cuando las cosas van mal pueden ir peor”, comentó Sergi Barjuan sobre la baja de Mauro en pleno partido. El Almería hace las maletas y el entrenador también.

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