El presidente del Almería tiene malas sensaciones. Piensa que le han hecho la bicicleta y se muerde la lengua hablando de errores puntuales “que nos han condenado”. Porque considera que “no voy a señalar a jugadores, pero en los últimos partidos hemos debido sumar 4 puntos como mínimo pero...”.

Alfonso García dice que no ha visto nada raro en sus directos rivales. No se ha querido meter en el barro y ha querido mirar a su equipo y promete buscar culpables del descenso virtual a Segunda División.

Tiene claro que nos vamos a Segunda ¿por tontos? y hemos perdido algo tan importante como depender de si mismo. En Sevilla solo dos fallos y dos goles. Como ante el Málaga o Celta.

Como dueño de la entidad tiene claro que han bajado porque no les ha llegado con esta plantilla y seguro que va a rectificar de cara al futuro.

Lo bueno de la historia es que el presidente sabe lo que tiene en su casa. Lo que vale y lo que sobra, por ello, habrá un ajuste fino en la plantilla y la tijera se llevará a muchos por delante.

Tiene mal cuerpo y malas sensaciones. Le vi en Carrusel con esa sensación tan almeriense cuando nos hacen “la pirula”. Yo también me quiero morder la lengua y bajar con honor a Segunda. Levantando la cabeza y montando fiestas en otros campos como hace nuestro Almería.

Estoy harto de ver al Almería siendo el “tonto de Primera”. Nadie nos tiende la mano y los dos entrenadores que nos llevaron a Primera nos dan el tiro de Gracia.

¿Se acuerdan señores cuando salvamos al Recre con un 0 a 2? y nos llamaron buenos andaluces.

Lo mismico que Málaga y Sevilla.

Tontos de remate.



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