La lluvia dio un respiro al Almería y la plantilla pudo ejercitarse con casi total normalidad en el Anexo. Si el martes tomó protagonismo el agua, este miércoles lo hizo el viento de norte, que sin llegar a dificultar del todo algunos ejercicios, sí era bastante molesto. Con todos disponibles, a excepción de Rubén, que continúa al margen, Juan Ignacio Martínez insistió en la presión y salida rápida al contraataque para hacer daño al Atlético de Madrid. La derrota que sufrieron los colchoneros en Balaídos les ha hecho bajar a la tierra y dar, de forma indirecta, mayor ánimo a los rojiblancos de cara a la visita al Vicente Calderón.

La recta final de la sesión dejó imágenes muy curiosas, como la de un partidillo a medio campo con tres porterías, defendidas por Julián, Yeray y Casitas. Las últimas acciones del mismo fueron centros de Casado y Ximo para que los delanteros acertasen de cara a gol, pero los defensas no perdonaron y Julián no encajó gol. Hoy, entrenamiento en el Estadio Mediterráneo a puerta cerrada.