El 21 de enero caía lesionado en el Benito Villamarín el rojiblanco Nelson. Las pruebas médicas a las que sometido dieron como resultado que el jugador padecía una rotura de grado II en el bíceps femoral de su pierna izquierda. El tiempo estimado de baja fue entre cuatro y seis semanas. El jugado puso fin ayer a este pequeño calvario que le ha mantenido apartado del grupo de trabajo ayer, es decir, un mes y 21 días después de caer lesionado.

¿Tiene ya el alta médica para jugar?.
Todavía no he hablado al respecto con el doctor. Pero hoy me siento contento y feliz por volver a trabajar con mis compañeros y poder entrenar sin problemas y sin ningún tipo de molestia. Durante esta semana quiero coger un poco de ritmo y buscar el estar preparado para que el entrenador pueda contar conmigo para el próximo partido frente al Levante, aunque sé que será difícil. Me siento bien y confiado.

Rafita se lo ha puesto muy difícil para jugar.
Estoy contento tanto por el juego que está haciendo Rafa como el de todo el equipo. Están compitiendo muy bien y el sábado sacaron adelante un partido muy importante. Que el nivel del equipo sea alto es muy bueno, aunque a mí me vaya a exigir bastante más. Voy a trabajar a tope para ponerme en forma y poder hacerle la competencia, en plan sano, a Rafa y que el técnico tenga más opciones.

¿Cómo ha encontrado a Barbosa, tras su encontronazo con Tiago?.
A nosotros nos duele siempre ver que un compañero de profesión sufre una lesión. Barbosa ha llamado a Tiago, ha hablado con él y todo ha quedado en un susto porque se pudo llegar a pensar que podía ser más grave. son cosas del fútbol.

¿Le salen las cuentas de la permanencia?
Nosotros somos optimistas. Somos conscientes que jugar en Primera es muy difícil pero confiamos en nuestro trabajo y en seguir dando lo máximo en cada partido porque hasta el final va a ser muy duro.

¿En qué estado anímico ve a Rodri?.
Estar lesionado es lo peor que le puede pasar a un futbolista. Rodri lo está pasando muy mal, tiene muchas ganas de aportar al equipo y de ayudar y no puede hacerlo. Un jugador, por el hecho de no poder trabajar con el grupo, ya siente un poco de frustración. Está triste porque lleva mucho tiempo sin entrenar, por no decir jugar y eso afecta bastante. Esperemos que pronto esté con nosotros porque nos hace falta. Le han dado un plazo de seis semanas, pero ojalá que vuelva antes, eso queremos.