Poco a poco, Francisco Jémez Martín, técnico canario de 43 años, se ha ido abriendo paso en el mundo del balompié nacional. Tras su paso por el Alcalá, Cartagena, Las Palmas y Córdoba, en estos dos equipos en dos temporadas, le llegó la oportunidad de dar el salto a Primera tras firmar una gran temporada con el equipo andaluz. Paco Jémez aprovechó la oportunidad que le dio el Rayo Vallecano la temporada anterior completando una gran campaña en la que fue capaz de inculcar a un equipo modesto como el titular de Vallecas el sello de su carácter, fundamentalmente trabajador y creativo.

Pintaban bastos Al comienzo del presente campeonato pintaron bastos para el Rayo y para su entrenador. Manteniendo la filosofía de juego de la anterior campaña, el equipo madrileño se vio avasallado por cuantos rivales tuvo enfrente hasta el punto de encajar en los seis primeros encuentros la friolera de 20 goles, lo que implicaba una media de 3’33 tantos encajados por encuentro celebrado, muy por encima del Almería, que en esos mismos seis compromisos ligueros había visto batida su puerta en 15 ocasiones con una media de 2’5 goles por encuentro.

Reacción rayista Consciente de que el camino iniciado por su equipo podía conducirle al abismo, Paco Jémez puso manos a la obra de detener la hemorragia de goles que padecía su equipo. Fruto del trabajo del técnico y de sus pupilos el cuadro vallecano sólo ha recibido un tanto en sus dos últimos duelos ante Valencia y Real Sociedad.