La afición rojiblanca sueña con la permanencia viendo el buen juego que su equipo ha desplegado en los dos primeros partidos de Liga, fruto sin duda del buen trabajo de Francisco y su equipo y el compromiso de sus jugadores, pero no las tiene todas consigo al ver que las buenas sensaciones no se han reflejado en la clasificación. Por juego, oportunidades y trabajo el Almería debería haber hecho pleno en las dos primeras jornadas.

En lugar de ello la hinchada rojiblanca sólo puede ver un punto en el casillero de su equipo. Algo pasa para que el Almería no sea a día de hoy colíder. Tras la pérdida de dos puntos en el tramo final del partido frente al Getafe el entrenador almeriense aseguraba que “estamos pecando de novatos”, puede que haya algo de eso, pero en la calle gana enteros la sensación de que hay algo más.
Una cosa es indudable y no casual: Sin Marcos Tébar el Almería deja de ser un equipo equilibrado para convertirse en un conjunto más que vulnerable.

En el encuentro ante el Villarreal el centrocampista Marcos Tébar dejaba el terreno de juego con 1-1 en el marcador. Aunque Rodri puso el 2-1 en el marcador, el Almería comenzó a hacer agua en su sistema defensivo, fundamentalmente en la medular y terminó perdiendo. En Getafe salíaMarcos en el minuto 78, su equipo ganaba 1-2 y terminó empatando gracias a la autopista que encontró Lafita sin que el volante que le salió al paso lo frenara.