El Almería ya ha cubierto 40 de las 42 etapas de que consta la Liga regular en Segunda División, o lo que es lo mismo, ha cubierto 3.600 de los 3.760 pasos que hay que dar para completar la ruta de la Liga Adelante. Eso quiere decir que al cuadro almeriense sólo le restan 180 zancadas para cumplir el objetivo del ascenso y 90 para asegurar, al menos, clasificarse como tercero para la disputa del playoff.
La escuadra rojiblanca tiene a su favor que está en un gran momento tanto físico como de moral ya que viene de completar su mejor racha de victorias de toda la temporada y que depende de él mismo.

El triunfo en Santo Domingo confirma la afirmación de su técnico en la previa del duelo ante el Alcorcón en el sentido de que a los rojiblancos les va la marcha y se crecen cuando se enfrentan a los mejores y ratifica su fortaleza actual, proclamada por Javi Gracia al término del duelo ante los alfareros.
Por otra parte el cuadro almeriense, en su caminar, no tiene que mirar ni hacia arriba ni hacia abajo, ni a la derecha ni a la izquierda, ya que el lograr una plaza en Primera el 8 o el 9 de junio, depende de cuando se juegue la última jornada, está al alcance de la mano de los rojiblancos y más cerca que nunca sin más que superar las dos últimas etapas.

La primera de ellas el domingo a las seis de la tarde en el Estadio Mediterráneo. Si en este duelo en la cumbre, se enfrentan tercero y cuarto si hoy gana el Villarreal al Xerez, el equipo local suma los tres puntos habrá superado definitivamente al Girona en la clasificación, ya que quedaría a cuatro puntos a falta sólo de tres y se aseguraría la tercera plaza. El saber que ganando en el Madrigal sería equipo de Primera y que si no  vence jugaría los playoffs en neta ventaja con los otros cuatro equipos clasificados, sería un plus de serenidad y seguridad a la hora de enfrentarse en su feudo al cuadro castellonense. La derrota de Las Palmas y los triunfos de Almería y Girona hacen que estos dos equipos ya estén matemáticamente clasificados para fase de ascenso.