Aunque la semana está siendo más tranquila después de ganar al Zaragoza, la realidad no esconde que el Almería sigue en descenso y para salir solo le vale ganar al Barcelona B. Verza reconoce que ahora es más importante sacar puntos que el jugar bonito. “Asimilamos rápido los conceptos del nuevo entrenador, porque no tenemos tiempo. Es culpa nuestra que hayan llegado los cambios, porque nosotros no fuimos capaces de llevar al campo lo que pedía Ramis”. Durante las sesiones de trabajo, Alcaraz insiste en la velocidad con la pelota y el balance defensivo, al margen de las acciones a balón parado, claves para desatascar partidos cerrados.

Nueva etapa
Con una amplia trayectoria en el fútbol profesional, Verza sabe que los vestuarios reviven con la llegada de un nuevo técnico. Ha pasado con Alcaraz, porque nada tienen que ver los entrenamientos de ahora con los de hace un mes. “Es lo que suele pasar con el cambio de entrenador, y no sé por qué no lo hicimos antes. Queremos agradar a Lucas y ganarnos el puesto. Veo más ganas que nunca, vamos al máximo y hasta hay exceso de agresividad”. Respecto al libro de estilo de Alcaraz, el oriolano no tiene dudas: “Tiene muy claro lo que quiere y trabaja bien sus equipos. Defensivamente seremos fuertes y arriba también vamos a llegar. Partimos de una base. Parece serio desde fuera, pero en el vestuario no lo es”.

Barça B
Solo suma un punto más que el Almería, 16. Se ha desinflado en las últimas semanas de competición, aunque la calidad de la plantilla azulgrana pone sobre aviso a Verza y sus compañeros. Los filiales son imprevisibles: “Le da igual el rival que tenga delante. Ellos tienen su estilo y se centran tanto en su fútbol que cuando pierden la pelota les cuesta replegar. Pero nosotros debemos provocar aquello de que juega y dejan jugar”. El vestuario ha reaccionado con Lucas Alcaraz.