El Almería cumplió su primera jornada en la concentración de pretemporada que ha comenzado a realizar en las instalaciones de La Manga Club, y lo hizo con un entrenamiento vespertino sobre un campo con un césped en perfectas condiciones en el que los rojiblancos desarrollaron un trabajo intenso, frenético y sin respiro que se prolongó por espacio de algo más de una hora y media.

La expedición almeriense viajó por la mañana a La Manga Club, a donde llegó para almorzar. A las 18,30 horas, en uno de los campos de fútbol que tiene el resort el Almería hizo unos ejercicios de activación para luego llevar a cabo una sesión con una parte física, muy exigente, y otra táctica, que se transcurrió con un gran ritmo.

En este sentido los jugadores realizaron acciones de posesión y presión en los que Luis Miguel Ramis y sus ayudantes no pararon de gritar y de motivar a sus futbolistas para que se emplearan a fondo y se ejercitaran con la máxima tensión. Precisamente el entrenador del conjunto almeriense apuesta por un fútbol de tener la pelota, de moverla con criterio, y cuando la tiene el rival, ir a por él, presionándolo, siempre con la idea de competir con la máxima intensidad.

Precisamente en esta primera sesión de entrenamiento en La Manga Club se buscó ir adquiriendo ya esas señas de identidad, al margen de potenciar también el aspecto físico.

El trabajo que realizaron los rojiblancos fue seguido de cerca por el presidente, Alfonso García, que se ha desplazado a La Manga Club, al igual que Miguel Angel Corona, director deportivo. Al final del entrenamiento ambos estuvieron dialogando con Ramis.

El miércoles y el jueves el Almería tendrá doble sesión a las 9,30 y 18,30 horas; el viernes se ejercitará por la tarde y el sábado afrontará el primer amistoso de la pretemporada contra el Levante.