Como en cada temporada y como en cada club el Almería ha comenzado a trabajar para dotar al nuevo edificio rojiblanco de unos sólidos cimientos.
Estos tienen que llegar de la mano de los máximos responsables técnicos de la entidad y, todos los que actualmente ejercen ese trabajo en el Almería tienen como fecha de caducidad el próximo 30 de junio. 
Son ya varios equipos los que han elegido a los hombres sobre lo que recaerá la reponsabilidad deportiva. El Zaragoza se ha llevado al director deportivo del Huesca y al entrenador y a dos jugadores del Reus.
Osasuna, que vuelve a ser de Segunda será dirigido desde el banquillo por Diego Martínez, que esta campaña ha entrenado al Sevilla At. y otros equipos que andan ultimando este tema.

Semana importante En el Almería lo normal es que esta misma semana se conozca tanto el nombre del director deportivo como el del entrenador. Porque a partir de que ambos aterricen se podrá planificar la composición de una plantilla que cuenta con una base importante del curso pasado, pero corta, y que necesita reforzarse con jugadores de un nivel superior en todas las líneas.
En el momento de iniciar los contactos ocupan la pole posición para ambos cargos los dos que están sirviendo a la entidad actualmente y hasta el 30 de junio.
Raúl Lozano no ha tenido oportunidad de trabajar demasiado porque cuando llegó la plantilla estaba cerrada, pero acertó de pleno recomendando el fichaje de Luis Miguel Ramis. 
Se puede decir que es un hombre de la casa por su pasado rojiblanco como jugador. Luis Miguel Ramis fue muy valiente aceptando el reto de salvar a un equipo hundido, pero menos gracias al buen trabajo de Fran Fernández. Desde que aterrizara en el vestuario ha apostado mucho más por creer en sus jugadores y en llevar la nave a buen puerto que salvaguardar su responsabilidad en la desesperada situación en la que estaba el equipo cuando se hizo cargo de él.
Se le pedía que lo mantuviera y lo ha logrado dejándolo además con más puntos que en la anterior campaña y en mejor posición.
Pero en cualquier caso es al presidente Alfonso García Gabarrón a quien corresponde tomar una decisión que, sin lugar a dudas, marcará el futuro de la entidad rojiblanca la próxima temporada en Segunda División.