Borja Fernández quería más. El centrocampista del Almería tuvo que firmar el empate después de las últimas llegadas del Huesca, y es que tocó sufrir hasta el último minuto por la superioridad por bandas que generaban los visitantes. "Me voy con mal sabor de boca, ya que necesitábamos los tres puntos y al final casi nos quedamos si ninguno", comentó el jugador rojiblanco.

No está nada mal para el Almería sumar cuatro puntos de seis posibles, pero no le llega para salir de la zona de descenso. En una situación tan delicada como la actual, Borja entiende que del Mediterráneo no se pueden ir rivales con puntos: "En una situación tan mala como la nuestra hubiéramos preferido empatar en Lugo y ganar en casa al Huesca, pero pensamos en que tenemos un punto más y seguiremos trabajando".

Faltó precisión. El Almería se mostró muy espeso en las acciones de ataque, ya que en ningún momento Sergio Herrera tuvo que intervenir para salvar un gol. Es otra de las espinitas que quedan clavadas en Borja Fernández: "Hubo jugadas en las que llegábamos con claridad al área contraria, pero entre la indecisión de tirar o falta de entendimiento no probamos a su portero. Esa fue una de las claves del encuentro".

Respecto al futuro de Fran Fernández no se quiso mojar, pero defiende el trabajo del míster almeriense: "Es cosa del club. En el vestuario tratamos de hacer lo que el míster nos dice y creo que realizamos un buen partido ante un rival que va muy por encima en la clasificación. Creo que fuimos muy sólidos".

Sonido SER: Borja Fernández, centrocampista del Almería.