Con sorpresa recibían los vecinos de la zona conocida como El Diseminado de Loma Cabrera que con las obras para realizar los nuevos accesos al barrio también se habían sustituido las tuberías por las que se da suministro de agua a las siete viviendas que allí hay.

Y es que, si bien es cierto que esas obras de sustitución de tuberías se ha realizado como una parte fundamental para poder proceder al asfaltado del camino, esos trabajos los han pagado los vecinos de esas casas ya que se encuentran fuera del tramo de zona urbana del barrio de Loma Cabrera y no tienen contadores de agua en cada vivienda sino que hay un espacio en el que están todos en la parte urbana desde que tienen suministro en el 1999.

Explica Enrique Rodríguez, uno de los vecinos afectados, que cuando se presentó el proyecto de las obras y se mostró que se iba a asfaltar el camino se le solicitó al Ayuntamiento de Almería que les cambiaran las tuberías que por allí circulan. Estos tubos se instalaron el año 99 con permiso municipal pero con financiación vecinal pero se colocaron a tan sólo 40 centímetros del suelo por lo que “cada vez que pasaba un camión de gran tonelaje y con el tiempo se rompían” y han tenido que ir “arreglándolos permanentemente” en estos años.

Según Rodríguez, en caso de asfaltar el camino sería inviable el abrirlo para seguir arreglando las averías por lo que pidieron que “antes de asfaltar hicieran el cambio”. Explica que tras reunirse con el concejal de Fomento, Manuel Guzmán, les prometió que “estudiarían el caso y mandarían un técnico” pero “llegaron las elecciones y no se nos dio solución” por lo que hablaron con la empresa que ha realizado la obra para pedir un presupuesto para cambiar las tuberías.

Financiación

Asegura Enrique Rodríguez que “sumando los trabajos de Copsa, las tuberías y el fontanero hemos pagado 1.500 euros por cabeza para que se hagan las obras” y todo “sin recibir una respuesta por parte del concejal aún sobre la posibilidad de que el Ayuntamiento nos ayude en parte del pago o que al menos nos digan que no”.