Los almerienses que, del sector de la construcción, han perdido su empleo en los últimos cuatro años suman 4.800. Impulsar un modelo sostenible de construcción que reactive la economía y tenga en cuenta el medio  ambiente es el objetivo del Plan Integral de Fomento para la Construcción y Rehabilitación Sostenible, aprobado el martes en Consejo de Gobierno y que supondrá, entre otras medidas, la inyección de 529 millones de euros para relanzar esta actividad en Andalucía hasta 2020.

Presentado en Almería por las delegadas del Gobierno y de Economía, Sonia Ferrer y Adriana Valverde, respectivamente, el Plan establece la rehabilitación como una alternativa de especialización, competitividad y empleo a partir de la intervención en edificios antiguos o de escasa calidad constructiva. Y siempre desde un punto de vista de mejora energética.

A falta de conocer qué cantidad exacta se destinará a ayudas en la provincia, la delegada del Gobierno en Almería, Sonia Ferrer, estima que será superior a la que en años anteriores se destinaba al Programa de Impulso a la Construcción Sostenible.

En 2014 se han gestionado en la provincia un total de 1.953 actuaciones en rehabilitación energética con un montante de ayudas de más de 12 millones de euros.

1.400 contrataciones Estas actuaciones suponen en la provincia más de 1.400 contrataciones de trabajadoras y ya son 740 las empresas colaboradoras.

La nueva estrategia, que mantiene cinco principios básicos, persigue seis objetivos y se desarrollará en trece programas a lo largo de 21 líneas de intervención.

Recoge un amplio conjunto de medidas e incentivos, según ha detallado Valverde, para mejorar el ahorro y la eficiencia energética de las edificaciones, configurar un tejido productivo y especializado en construcción sostenible, impulsar el uso de fuentes renovables, agilizar y reducir trámites administrativos, favorecer la transparencia frente a las prácticas especulativas, incorporar en las adjudicaciones públicas requerimientos de inserción laboral, atender las necesidades de vivienda y energía de los colectivos más vulnerables, y fomentar la creación de un clúster (o grupo de empresas e instituciones coordinadas) de la construcción sostenible capaz de establecer alianzar y captar y exportar proyectos.

Otras iniciativas previstas son la constitución de una red de gestores energéticos como salida laboral especialmente dirigida a los jóvenes, la implantación de nuevos perfiles profesionales, desarrollo de un marco normativo que garantice el óptimo funcionamiento del sector, y la puesta en marcha de medidas para afianzar la posición de Andalucía en el exterior como referente en rehabilitación y construcción sostenible.

Respecto a las medidas de ahorro, eficiencia energética y uso de fuentes renovables, e plan dará continuidad a la línea de incentivos abierta en 2009 para respaldar inversiones en esta materia. Asimismo, adaptará los requisitos del nuevo Marco de Apoyo Comunitario de la Unión Europea 2014-2020 los incentivos del Programa de Impulso a la Construcción Sostenible de Andalucía.

Nuevo modelo económico Y todo con el propósito de “reorientar” el modelo de la construcción como sector económico para que gane capacidad de generar empleo y empleo de calidad, a la par que suponga una actualización con toda la normativa relacionada con la sostenibilidad energética, ha dicho Sonia Ferrer, que ha destacado también cómo el ciudadano ha de ser el centro de la demanda en este sector como uno de los principios del Plan Integral de Fomento para la Construcción y Rehabilitación Sostenible de Andalucía.

Y es que la construcción ha de recuperar un “papel activo en la recuperación económica” de la Comunidad Autónoma, aunque de una forma diferente a como lo ha hecho hasta ahora, han insistido tanto Ferrer como la delegada territorial de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo.