La plaga de mosquitos de Almería llega hasta el Defensor del Pueblo Andaluz, después de que el portavoz del grupo municipal de IU en el Ayuntamiento, Rafael Esteban, hubiera decidido informar, de forma urgente, a la oficina de quejas de esta institución de la polémica suscitada entre el consistorio capitalino y la Junta de Andalucía por dirimir la competencia en el asunto de los mosquitos del río Andarax.
Solicita Esteban del Defensor del Pueblo que realice los oportunos requerimientos a las administraciones competentes (Ayuntamiento y Junta) para adoptar una solución urgente que palíe la situación de acumulación y filtración de aguas residuales en el Andarax, en algunos tramos que transcurren por el término municipal para evitar plagas de mosquitos y malos olores.

Espectáculo político Esteban considera un “espectáculo político lamentable” la actitud de ambas administraciones públicas. Señala en una nota como  los partidos mayoritarios “están mostrando a las claras su desidia, negligencia e incapacidad administrativa para solucionar el problema que los vertidos de aguas fecales sin el adecuado tratamiento están provocando en el cauce natural del río Andarax”. Resulta paradójico, insiste el concejal de IU, que “en pleno siglo XXI, ambos partidos que gobiernan los intereses de los ciudadanos se echen los trastos a la cabeza y no muestren ni un resquicio de responsabilidad política”.

Impotencia vecinal Así, la queja al defensor del pueblo responde  en cierta medida a la “impotencia que sienten los ciudadanos por comprobar la existencia de ciertos políticos que no asumen sus compromisos de gobierno y que sólo utilizan la Política de forma partidista y rastrera”, explica Esteban.
En este sentido, IU acusa al portavoz del PP en el ayuntamiento de Almería de “cinismo” por protagonizar la queja de uno de los barrios más abandonados de la ciudad.
La queja al Defensor del Pueblo Andaluz contiene tanto una exposición de motivos legales sobre competencias administrativas como el informe de Salud.

El presidente de la Diputación de Almería, Gabriel Amat, exige a la Junta que “no eche pelotas fuera” y “cumpla con su responsabilidad” para atajar la proliferación de mosquitos que emana del río Andarax. Contestaba así Amat al delegado de Medio Ambiente, José Manuel Ortiz, quien insistía en que la responsabilidad sobre el tratamiento de las aguas residuales es de los ayuntamientos.