Fue instalado en el mes de abril de 2023 y cuando han pasado apenas dos años y medio, su aspecto deja bastante que desear y su uso es bien distinto al planteado. En aquel entonces se presentaba como el primer "tótem urbano equipado con desfibrilador", un instrumento situado junto al Mercado Central en su entrada por el Paseo de Almería que convertía todo el entorno en una zona 'cardioprotegida'. Era, además, la primera piedra para la intencion municipal de convertir a Almería en una 'Ciudad Cardioprotegida'. La historia, en octubre de 2025, es bien distinta.

Tal y como se puede apreciar en la imagen que acompaña a estas líneas, el desfibrilador del Paseo de Almería ha sido vandalizado: el tótem aparece lleno de pintadas y, por si fuera poco, los cables del desfibrilador se encuentran fuera de su espacio.

Además, el hueco en el que se encuentra este instrumento que puede salvar vidas contiene residuos, como si se hubiera convertido en una papelera urbana del entorno del Mercado Central. 

La importancia de un desfibrilador en mitad de la calle

La presencia de un desfibrilador en la calle puede salvar vidas. No en vano, la velocidad de reacción ante una parada cardiorrespiratoria puede ser esencial para la supervivencia de quien la sufre. Hay estadísticas que señalan que, con cada minuto que pasa sin la combinación de reanimación cardiopulmonar (RCP) y una descarga de un desfibrilador semiautomático (DESA) como el instalado en el entorno del Mercado Central, la probabilidad de supervivencia disminuye en torno a un 10 %.

No obstante, como es obvio, no vale solo con que haya desfibriladores: el mantenimiento es esencial para que, cuando se necesiten, puedan usarse. Además, es importante que cuenten con la información necesaria como para saber utilizarlos. 

En Almería hay casos de éxito en los que la instalación de estos aparatos aseguran un entorno razonable. Es el caso de Níjar, que en colaboración con la Universidad de Almería ha instalado ocho desfibriladores semiautomáticos en puntos estratégicos públicos de núcleos costeros y urbanos —San José, Agua Amarga, Isleta del Moro, Las Negras, Rodalquilar, Villa de Níjar, San Isidro y Campohermoso—, con acceso las 24 horas.

Sin embargo, el existente en pleno Paseo de Almería se ha convertido, por ahora, en una papelera cerca del Paseo de Almería.