Basuras, contenedores rotos y chabolas: problemas del Sector 20
Los empresarios afirman que la basura hace “efecto llamada” para que vayan de fuera a echar residuos
Junto al río, más allá de la valla que cierra el polígono industrial del Sector 20, han empezado a aparecer chabolas
Cartones por doquier, plásticos, maderas y hasta sofás. Así se encuentran las calles del Polígono Industrial Sector 20, el principal espacio localizado de naves industriales con las que cuenta la capital almeriense y el Ayuntamiento trabaja en ampliar.
Es cierto que en este espacio empresarial la gestión se lleva por parte de una Entidad de Conservación y que sobre ella recae la limpieza pero no es menos cierto que el sector no cuenta con los medios necesarios para la recogida de los residuos que se generan en estas naves.
Cartones y plásticos llenan una de las calles del sector
Recorriendo las calles de ‘barrio’ industrial todos los contenedores que se avistan son grises, los destinados a residuos que no pueden ser reciclados ni compostados, y cuando una pasea por la zona lo que encuentra son, alrededor de cada uno de ellos, montañas de cajas de cartón y plásticos que son, eminentemente, los materiales que desechan estas empresas.
El no contar con contenedores de reciclaje adecuados y este cúmulo de suciedad alrededor, ha supuesto, según explican los propios empresarios de la zona, “un efecto llamada que ha derivado a que en los últimos dos años mucha gente haya decidido venir al sector a tirar todo aquello que no sabe donde tirar, de palets a sofás”.
Junto a los contenedores grises se acumulan todo tipo de envases
Con respecto a la responsabilidad de la entidad de hacerse cargo de la limpieza, aseguran que se realiza de forma asidua pero “no dura ni dos días” ya que la gente vuelve a acudir a tirar las cosas.
Uno de los puntos de mayor conflictividad, según explican, se sitúa en el solar que separa el barrio de El Puche y el sector. Allí se tiran desde restos de obras hasta muebles.
En la zona ya tiran hasta sofás y todo tipo de enseres
Y aseguran que, este espacio en el que un día estuvieron las viviendas prefabricadas que dieron cobijo a los vecinos de El Puche centro durante la rehabilitación de sus viviendas, comienzan a aparecer chabolas.
Un fenómeno que también se ha iniciado junto al sector, algo más allá de la valla que le separa del río Andarax. Allí, junto a restos materiales que llevan la leyenda del Ministerio de Trabajo, se pueden ver un par de infraviviendas.
Piden los empresarios del polígono que se coloquen los contenedores adecuados y se incremente la vigilancia para tratar de parar este efecto llamada que está convirtiendo el principal espacio industrial de la capital almeriense casi en un vertedero.